A finales del pasado año el Gobierno de España aprobó el real decreto ley de Reforma Laboral. Entre otras medidas se busca acabar con el elevado índice de temporalidad que vive el mercado de trabajo español. Para facilitar la adaptación, las medidas de temporalidad tenían un plazo de ejecución de entre 3 y 6 meses, por lo que en estas semanas se materializarán. Es ahí donde surge el problema con las bolsas de trabajo temporal municipales que en tal caso ya no cumplen la Ley y deberían de dejar de contar con la rotación habitual para puestos de trabajo que ahora se considerarían estructurales y deben de ser cubiertos por una persona de forma permanente.
Desde el Ayuntamiento de Loja entienden que se debe de buscar una excepcionalidad a las bolsas de trabajo sociales rotativas de los consistorios y diferenciarlas de aquellas gestiones de empresas privadas que tienen otros objetivos. En ese sentido se afirma que en el municipio se deberían de suspender las 12 bolsas de empleo que existen de este carácter lo que afecta a cerca de 250 personas. Ejemplo de la afección que esto tendría para el municipio son las bolsas de empleo de limpieza en pedanías que facilitaba contar con tres meses cotizados a personas del propio núcleo rural.
El teniente de alcalde delegado de Recursos Humanos, José Luis Sánchez, asegura que la nueva Ley corta la manera de trabajar del Ayuntamiento desde el 2011 donde se contaba con opciones para tener experiencia laborar en el consistorio. “No se puede tirar de bolsas de empleo sino hacer contratos fijos o coberturas por vacantes”, comenta el edil y asegura que es un problema que se crea. Para Sánchez se trata de una faena para muchas familias del medio rural que contaban con estos puestos de trabajo y que con esta Ley el Ayuntamiento tiene “las manos atadas”.
“Muy injusto” le parece al alcalde de Loja, Joaquín Camacho, esta medida provocada por la nueva Reforma Laboral que entiende es la misma sensación de primeros ediles de diferente signo político. Para el regidor lojeño “es la letra pequeña de una reforma laboral que decían era muy beneficiosa pero que ahora afecta a 250 personas” y añade que esto “es una faena para los vecinos”. Camacho cree que las bolsas municipales tienen un carácter social y que es más justo hacer que los trabajos sean rotativos y no fijos.
El primer edil afirma que se ha buscado el ajuste legal pero que dentro de la Ley no se contempla esta dicotomía. Ello obliga, asegura el regidor, a contar con un proceso selectivo que otorgue un puesto de trabajo estructural fijo. Ante esto, Camacho aseguró que visitarán todas las pedanías para explicar la nueva Ley. Por último, avanzó que trabajarán con el resto de municipios para que se contemple esta excepción pero que mientras tanto la Ley está en vigor.
