No todo es la pandemia pero sí es cierto que todo problema lo multiplica. Es lo que sucede con los casos de violencia de género y con la brecha de la igualdad real de género. Estar más tiempo en casa obliga a muchas mujeres a convivir más tiempo con su agresor y también permite cuartar el avance laborar de las mismas obligándolas a ser mayor sustento de la conciliación familiar en estos tiempos tan complicados.
Para ayudar a superar esta situación de estrés, que se vive en todos los ámbitos debido al gravamen de la pandemia, el Ayuntamiento de Loja ha reforzado el servicio que presta el Centro de Información de la Mujer dentro del Área de Igualdad. Gracias al Pacto de Estado del Gobierno de España y con la gestión de la Junta de Andalucía se ha contratado durante 9 meses a una trabajadora social y una psicóloga. Estas contrataciones se unen a otras acciones de concienciación contra la violencia de género que se han ido llevando a cabo en los últimos meses, como son talleres, prácticas, etc.
Cabe recordar que el puesto de psicóloga se incorporó desde el pasado año a la relación de puestos de trabajo del Ayuntamiento de Loja, por lo que es un puesto estructural que se mantendrá de forma constante en este centro. La nueva psicóloga acude para cubrir la baja por maternidad de la empleada titular del puesto. Sí se suma como nuevo servicio la trabajadora social que se suma a los otros tres servicios: psicología, asesoría jurídica e informadora social. Las mismas prestan servicio de forma diaria de 8 a 15 horas, contando con buena acogida entre las usuarias de Loja y la comarca.
Matilde Ortiz, teniente de alcalde delegada de Bienestar Social e Igualdad, reconocía que este servicio es un “proyecto ilusionante y bonito” que da una ayuda integral. Ortiz afirmó sentirse orgullosa y satisfecha de un centro con tantas opciones y programación. “Es un servicio que los ayuntamientos estamos en la obligación de prestar”, aseguró la edil enfatizando en que el mismo cuenta de forma diaria con gran cantidad de citas.
“Es uno de los servicios que presta el Ayuntamiento de Loja con mayor satisfacción”, comentó por su parte el regidor, Joaquín Camacho, admitiendo que es una necesidad esencial para muchas familias de Loja y la comarca. Para el primer edil el centro hace una labor fundamental para sacar adelante situaciones sociales de desventaja. Camacho reconoció cuando llegó a la responsabilidad de Gobierno este centro hacía un gran trabajo pero estaba a medio gas y que ahora con este refuerzo se apuesta de verdad por él. También admitió que es ahora cuando debemos de ver que el COVID no es todo sino que siguen agravándose los problemas que ya existían.
Las propias profesionales, que se incorporan al centro, nos comentaron cual será el servicio que prestarán. Carmen Rodríguez, es la nueva trabajadora social del Centro de Información a la Mujer de Loja, y reconoce que al no existir con anterioridad esta figura trabaja en estos primeros días en la concreción de su funcionalidad. Adelantando sus acciones afirma que buscarán reforzar la sensibilización en la población en general y la juventud en particular. En este sentido entiende que hay una necesidad de trabajo en edades tempranas. También buscarán orientar a las mujeres en general en relación a ayudas, subvenciones, recursos y actividades que les puedan servir para su desarrollo personal o profesional.
Rodríguez entiende que esta pandemia ha supuesto un retroceso en la igualdad de género. En concreto opina que la misma ha posibilitado ocultar más la salida laborar de la mujer dentro de la conciliación familiar. “Se ha vuelto a sobrecargar la figura femenina”, opina la trabajadora social.
Ana Cueva será los próximos meses la psicóloga de este centro. Ella destaca la importancia de una atención psicológica a las mujeres víctimas de violencia de género y en general para aquellas que buscan superar sus objetivos día a día. Cueva reitera que este servicio se debe de unir al resto de trabajados interdisciplinares que presta el centro. También reconoce que la pandemia hace mella en la violencia de género al unir más tiempo al agresor y la víctima.
