Loja vuelva a ser la protagonista de fondo de las informaciones sobre las comunicaciones ferroviarias en la provincia. Granada capital conmemora hoy un año de la llegada del primer tren AVE procedente de Madrid. Un cumpleaños que no deja buenos datos de pasajeros, en buena parte por la crisis sanitaria que ha paralizado el país durante más de tres meses.
El protagonismo lojeño, siempre en segundo plano, cabe recordar que en ese viaje inaugural ni se paro en Loja ni se nombró al municipio en el acto posterior en la Estación de Andaluces, radica en las obras del primer tramo de la Variante. Desde Granada se afirma que es una obra más que necesaria para lograr un AVE de verdad. También reseñan la importancia de acertar con la integración del tren en la capital.
El pasado mes de octubre el Gobierno licitó por 14 millones de euros uno de los cuatro tramos de ese trazado que posibilitará superar la capital del Poniente sin atravesarla. El plazo de ejecución del mismo era de 22 meses, aunque el parón por la crisis sanitaria lo ampliará. Se estima que no sea hasta finales de 2021 o principio de 2022 cuando se tenga finalizado este tramo.
La Variante de Loja cuenta con 27 kilómetros que transcurren por la falda de la Sierra Gorda, al sur de la ciudad. La prisa del Gobierno era licitar al menos el primer tramo antes de que caducara la Declaración de Impacto Ambiente, toda vez ese trámite podría haber provocado un retraso de años. Las obras actuales se centran en 1,7 kilómetros que contempla el Viaducto de Riofrío sobre la línea convencional Bobadilla- Granada- Variante.
El proyecto contempla la ejecución de las obras de infraestructura, drenaje, estructuras, reposición de los servicios y servidumbres afectados. La superestructura (vía) y las instalaciones de señalización, electrificación y comunicaciones serán objeto de otros contratos. La Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por Copisa Constructora Pirenaica y Estructuras Aragón es la encargada de realizar estos trabajos.
La actuación se inicia en la conexión con el tramo Quejigares-Variante de Loja (punto kilométrico 102/100), en la zona del terraplén previo al primer estribo del viaducto sobre la línea férrea de ancho convencional Bobadilla-Granada. Este viaducto de 580 metros está ejecutado parcialmente, al igual que las obras de tierras (terraplenes y desmontes).
Sobre el tramo Variante de Loja (Riofrío) se continuará el terraplén en el que se ha construido un paso de fauna y ejecutado una obra de drenaje necesaria para la reposición de la Colada del Martinete. El tramo finaliza en una sección a media ladera entre los puntos kilométricos 1/380 y 1/680,803 en la que se localizan dos obras de drenaje que garantizan la permeabilidad del tronco ferroviario de alta velocidad, y conectan con las obras de drenaje existentes en la línea convencional Bobadilla-Granada adyacente.
Desde Granada ven la Variante de Loja como solución al descenso de la velocidad que viven los trenes en su entrada al poniente. El paso actual del AVE a 40 kilómetros por hora a su paso por el Barrio de San Francisco fue de lo más destacado en las crónicas de ese primer viaje inaugural. Ese nueva velocidad tendrá que espera ya que de momento Adif no ha anunciado la licitación de los otros tres tramos.
En esta tesitura, el municipio cuenta, al igual que la capital, con una única conexión con Madrid y otra dos con Sevilla. Son muchas las asociaciones granadinas que reclaman más conexiones y trenes convencionales de cercanía. En suspenso quedaron los Avant con Málaga que siguen sin fecha para su puesta en marcha. El Ayuntamiento sigue reclamando más conexiones con la celebración de plenos extraordinarios.