El gobierno municipal del Partido Popular ha salido al paso de las críticas vertidas hace unos días por el PSOE que le acusaba de “abandonar” al colectivo de inmigrantes residentes en Loja durante la presente legislatura. La concejal de Bienestar Social, Matilde Ortiz, desmintió que la oficina del inmigrante se haya cerrado y aseguró que “sigue prestando el mismo servicio y asesoramiento que cuando gobernaban los socialistas”.
Según Ortiz, ningún inmigrante que haya demandado estos servicios “se ha visto discriminado” y todos están siendo atendidos a nivel social “igual que antes”. En este sentido, desgranó los datos de un informe municipal que indica que la oficina atendió 100 consultas y tramitó en el último año 25 informes de arraigo, 10 ayudas económicas familiares, 22 para adquisición de material escolar, 13 de servicio de comedor y 22 ayudas de suministros vitales básicos.
“No es ético que se haga campaña electoral con estos temas; todas las familias inmigrantes que necesitan ayuda del ayuntamiento son atendidas exactamente igual que cualquier lojeño”, subrayó la concejal.
El alcalde, por su parte, acusó a los socialistas de hacer política “sucia” con este tema y calificó las palabras de su candidato, Juan Francisco Mancilla, de “metedura de pata”. “Mancilla está utilizando a los inmigrantes como lo hizo con los vecinos de la Estación, se reúne con ellos para intentar engañarlos”, afirmó Joaquín Camacho, quien añadió que “demuestra que no conoce los servicios del ayuntamiento y que hace lo que sea por un puñado de votos”.