Bajo el lema “El cáncer es igual para todos, pero no todos somos iguales frente al cáncer”, la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) conmemoró el pasado 4 de febrero su efeméride. En el caso de Loja, las voluntarias de la Junta Local salieron a la calle con el objetivo de explicar a las personas interesadas las desigualdades existentes a la hora de enfrentarse a esta enfermedad y lo hicieron con dos mesas informativas en distintos puntos de la ciudad: una, a las puertas del Hospital y, otra, en la Avenida de los Ángeles.
Además de entregar folletos informativos durante toda la mañana del pasado viernes, invitaron al público a adherirse al #acuerdocontraelcáncer para conseguir acabar con estas diferencias entre enfermos, firmando digitalmente a través de un código QR. Además, en todas las farmacias se colgaron cartelería de esta campaña con la finalidad de llamar la atención del mayor número de población.
La presidenta de la Junta Local, Isabel Pavón, subrayó la importancia de este día porque “nos lleva a reflexionar sobre cuestiones que son muy importantes para las personas que están pasando por la enfermedad. Llevamos varios años con este lema -que surgió a raíz de la pandemia-, y que viene a decir que el cáncer es igual para todos, pero no todos nos enfrentamos de igual forma”.
Entre los tres motivos principales en la desigualdad frente al cáncer se encuentran el lugar donde se vive, la posición socioeconómica e incluso el género, según datos obtenidos del estudio realizado por el Observatorio del Cáncer que deja claro estas diferencias.
“Nuestra situación laboral, social, económica e incluso nuestra situación geográfica, y es muy curioso decirlo, afecta a cómo podamos afrontar ese cáncer, porque cómo dicen los folletos que entregamos tú código postal afecta más que tú código genético, ya que hay comunidades autónomas donde los programas de cribado son más amplios que en otras y esto no debería estar ocurriendo”. La responsable se refirió a los programas de detección del cáncer de mama en una franja muy reducida de edad (de 50 a 65 años) o de pulmón, con la falta de legislación de espacios libres de humos como reglamentan otros países europeos.
En cuanto al género, Pavón informó que “más del doble de mujeres que de hombres ingresan menos del Salario Mínimo Interprofesional por lo que los costes económicos son menos asumibles que en el caso masculino”.
Por todo esto, desde la AECC se quiere que “este día se reflexione sobre estas diferencias y se firme digitalmente el acuerdo porque es muy importante que se consigan 500.000 firmas para intentar cambiar y salvar todas estas desigualdades y que no tengamos que volver a repetir este lema”.
Seguidamente, el alcalde de Loja, Joaquín Camacho, se refirió a la campaña porque cree que “hay que pasar una enfermedad lo más digna posible y que cualquier persona tenga las mismas posibilidades de afrontar el coste que tiene el tratamiento o los cuidados paralelos de la propia enfermedad”.
Reiteró la necesidad de apostar por la investigación de esta enfermedad. “La importancia vital de invertir en investigación, pero también con esta campaña tan necesaria, en la que no solo se informa, si no se pide la implicación de la sociedad para participar en un acuerdo para que haya igualdad en el tratamiento de esta enfermedad”, manifestó, ya que “esto no debería estar pasando en distintas comunidades y esto se deber corregir y por eso desde el Ayuntamiento estamos colaborando con esta campaña”.
Alabó la labor de la Junta Local y de todos los voluntarios por el trabajo que realizan para “visibilizar este tipo de campañas y a todas las personas decirles que hay esperanza pero que también necesitamos el apoyo de todas las administraciones, asociaciones y a las propias familias en esta lucha”.
Todas las diferencias que existen se pueden consultar en acuerdocontraelcancer.com