La situación de alarma por la crisis sanitaria debida al Covid-19 está suponiendo un grado más de dificultad para las familias que pasan necesidades y a las que se viene atendiendo desde el Banco de Alimentos de Granada a través de su delegación en Loja y el Poniente Granadino. Si muchas personas ya estaban viviendo una situación dramática, la misma se ha visto acrecentada durante los dos últimos meses y ha hecho que, a las familias a las que ya se venía atendiendo, se les hayan sumado otras más a las que la crisis ha afectado por la pérdida o la precariedad de sus trabajos. Así, según informa desde la delegación en Loja, en nuestra comarca se está atendiendo actualmente a un total de 435 familias, después de haber visto cómo otra veintena aproximadamente se han incorporado a la lista con la que se trabaja desde la delegación, en coordinación también con los Servicios Sociales Comunitarios y con el apoyo ya habitual de las asociaciones con las que viene trabajando el Banco de Alimentos en Loja, como son la Iglesia Evangélica, San Gabriel y Loja Solidaria.
Como explica Celso Rojas, desde hace unos meses delegado del Banco de Alimentos en la zona, “hemos visto durante estos dos meses cómo han crecido las necesidades por parte de las familias, que en un principio hemos seguido atendiendo a través de una de nuestras asociaciones, como es la Iglesia Evangélica, que no pararon a pesar de la situación de confinamiento para poder atender a las familias con más necesidad, algunas de ellas en una situación realmente crítica y gracias también a la ayuda del Supermercado Consum, que nos da todos los días alimentos”. Celso Rojas añade que “muchas familias tenían trabajos poco estables y dependían del mismo para salir adelante y al perderlos se han encontrado en una situación muy difícil”.
Estas 435 familias a las que se atiende actualmente suponen en número más de un millar de personas en total, sumando las de Loja y el resto de localidades del Poniente.
Lógicamente, como explica el coordinador del Banco de Alimentos “se están tomando todas las medidas de precaución gracias también a que el Ayuntamiento nos aportó mascarillas, pantallas faciales y guantes para poder atender a estas familias y establecemos turnos para ello, de tal forma que cada día atendemos a unas veinte familias”, explica.
Para esta labor el Banco de Alimentos de Loja cuenta en este momento con seis voluntarios operativos, ya que como informa Celso Rojas “en este momento por el Estado de Alarma algunos no pueden salir por ser grupos de riesgo, ya que contamos con algunas personas mayores, pero sí están ayudando desde sus casas haciendo trabajo de oficina o animándonos a los que estamos en la calle”. Y es que no hay que olvidar que estos voluntarios están expuestos cada día al virus. “Por supuesto que tenemos miedo a contagiarnos y llevar al virus también a nuestras casas, por eso tomamos todas las medidas de precaución, porque no podemos dejar de atender a estas familias”. Desde luego, en estos tiempos que corren, aún hay que valorar más y reconocer la labor que realiza esta asociación.
Reconoce el coordinador que necesitarían más voluntarios, algo que no es nuevo pero, de momento, se organizan y coordinan para poder atender todas las necesidades.
El coordinador del Banco de Alimentos nos cuenta que “trabajando en esta labor estamos acostumbrados a ver cada día situaciones muy dramáticas y es muy duro para nosotros y ahora incluso está empeorando para muchas familias”. Además, añade que “estas personas también tienen miedo al contagio, lo que aún agrava más su situación y su ánimo”.
Celso Rojas entiende que esta situación de crisis va a continuar todavía mucho tiempo pero se muestra esperanzado en que se pueda ir volviendo poco a poco a la normalidad a medida que se vaya avanzando en la desescalada. “Tendremos más voluntarios, se podrán incorporar también el resto de las asociaciones, contaremos con más alimentos también, que ya nos están llegando desde Granada y podremos atender mucho mejor las necesidades”.
Por último, el coordinador del Banco de Alimentos lanza un mensaje de ánimo a todos los lojeños en general y a las familias que peor lo están pasando, en particular. “Les digo que tengan fe, que no se achiquen y no se dejen atrapar por el miedo y la ansiedad”. Por eso, muestra su agradecimiento a todos los voluntarios, así como al Ayuntamiento y a la Policía Local que, según cuenta, les está facilitando la labor. Además, destaca la solidaridad que encuentra en general en España. “Yo soy de Brasil y esto es algo que me ha impactado, la solidaridad que hay aquí”, concluye Celso Rojas.