La Asociación Granadina de Amigos del Pueblo Saharaui cuenta desde hace unos meses con una nueva coordinadora en el Poniente Granadino. Se llama Pilar Vivancos, es vecina de Huétor Tájar y lleva cinco años vinculada al colectivo. Afirma que su contacto con este pueblo le ha cambiado la vida. Afronta ilusionada y entusiasmada esta nueva responsabilidad, sabiendo del trabajo que conlleva. Vivancos sustituye en el cargo a la lojeña Maribel Cáceres, que sigue perteneciendo a la asociación.
Dentro de su propia experiencia en el acogimiento de niños y sus visitas a los campamentos de refugiados, Vivancos explica que ha descubierto un pueblo que “da todo a cambio de nada” a pesar de vivir en condiciones infrahumanas. También destaca que “cuando los visitas, te sientes como en tu propia casa”.
Este verano, el proyecto ‘Vacaciones en Paz’ ha traído hasta la comarca a diez niños y niñas saharauis, procedentes de los campamentos de refugiados de Tinduf, que son acogidos por distintas familias durante los meses de julio y agosto. Vivancos lamenta que esta cifra sea menor que los últimos años. “Ha bajado el número de acogidas, porque hay hogares que ahora no pueden”, afirma.
El objetivo del programa es que puedan disfrutar de unas pequeñas vacaciones alejados de los problemas que tiene su pueblo, dándoles un respiro de las duras condiciones de vida que pasan el resto del año, con temperaturas extremas del desierto cercanas a los 50 grados. “Se van muy recuperados y descubren muchas cosas”, subraya Pilar Vivancos.
La Asociación Granadina de Amigos del Pueblo Saharaui realiza diferentes actividades con el objetivo de sufragar los gastos de viaje de estos niños, que suponen unos 700 euros por cada uno de ellos. Así, el próximo viernes 22 de agosto, a partir de las 21:30 horas, se realizará una cena solidaria en el Asador Manzanil de Loja. Vivancos anima a los lojeños a que acudan a esta cita solidaria.
