Miles de personas están disfrutando desde esta mañana de una espléndida jornada de fiesta y confraternidad con la Romería de la Amistad, el tradicional encuentro que organiza cada 1 de Mayo la peña Dinámico Aliatar con la colaboración del Ayuntamiento de Loja. Un año más la pedanía lojeña de la Venta del Rayo está siendo el escenario de esta celebración romera que alcanza su 27ª edición con muy buen ambiente y en un día soleado y caluroso.
La jornada festiva comenzó a las 10 de la mañana en la Iglesia de Santa Catalina con una Misa dedicada a San Isidro Labrador, que está acompañando a los romeros durante toda la jornada campestre. La Eucaristía contó con la presencia de muchos romeros y del conocido coro rociero de ‘Las Niñas’. Después, la imagen del santo fue trasladada a hombros hasta su carreta situada en la avenida de los Ángeles. San Isidro encabezaba una larga comitiva compuesta de una treintena de carrozas y vehículos ricamente adornados con motivos andaluces y primaverales.
En torno a las 11 de la mañana comenzaba el traslado hacia la pedanía lojeña, en la que los asistentes están disfrutando de un buen ambiente festivo, entre toques de guitarra, bailes y alegría. Como es habitual, la organización entregará a cada una de las carrozas participantes un plato de cerámica conmemorativo característico de la romería. Además, se ofrecen otra serie de premios entre los asistentes y este año también un jamón a cada una de las carrozas inscritas para la ocasión.
Tras disfrutar del almuerzo, uno de los momentos más esperados por todos los romeros y asistentes se produce en torno al escenario, en el que hay oportunidad de disfrutar de la música y el baile. Así durante aproximadamente dos horas, hasta que a partir de las 20 horas se inicie el viaje de regreso a Loja.
Cansados pero con la satisfacción de haber vivido una intensa jornada, bajo un ambiente de familiaridad, confraternización y amistad, como reza el lema de la Romería, representantes de la organización y las asociaciones participantes, acompañarán a San Isidro a su lugar de origen y a la espera de que el próximo año llegue una nueva edición de esta tradicional fiesta romera que los lojeños viven desde hace años con gran interés e ilusión.
