Manuel, un joven lojeño con síndrome de Asperger, estará otros seis meses realizando prácticas profesionales como ayudante de conserje en el Ayuntamiento de Loja. Consistorio y la asociación Asperger de Granada renovaron ayer el convenio que tiene como objetivo fomentar su inserción laboral.
El síndrome de Asperger es aparentemente invisible para la población en general. La persona que lo presenta tiene un aspecto normal, capacidad normal de inteligencia, pero tiene problemas para relacionarse con los demás.
La asociación granadina tiene hoy día alrededor de un centenar de socios en toda la provincia, de los que unos 20 realizan prácticas en instituciones o empresas. El psicólogo-orientador de este colectivo, Rodrigo Contreras, agradeció al Ayuntamiento de Loja “la oportunidad que brinda para que uno de nuestros chavales tenga una oportunidad de trabajo” y añadió que “a veces, que tengan una vida digna y hagan lo que cualquier otra persona, es la mejor terapia que pueden tener”.
En la firma del acuerdo, en la que Manuel estuvo acompañado de su madre, el alcalde Joaquín Camacho mostró su satisfacción por contribuir desde la administración local a que estas personas “tengan una vida lo más normalizada posible dentro de sus propias características”. Sobre el joven destacó su “lucha, trabajo e inquietud” y que “no encuentra barreras para salir adelante”.
El Consistorio lojeño mantiene activos acuerdos de similares características con otras asociaciones, como es el caso de Granadown.