Los vecinos del núcleo rural de la Atajea se han vuelto a quedar sin agua potable en sus domicilios. Las intensas lluvias de los últimos días han provocado que el manantial que les surte vuelva a tener turbidez, lo que ha llevado a la Delegación Territorial de la Consejería de Salud y Consumo de la Junta a calificar este agua como “no apta para el consumo humano”.
En consecuencia, un Bando de Alcaldía informa a la población de que el agua del grifo “no podrá usarse para beber, ni como ingrediente para la preparación de alimentos, así como limpieza de las vajillas o instrumentos que puedan estar en contacto con los alimentos, ni para la higiene personal”.
La empresa municipal Gemalsa está realizando un suministro de agua mediante un camión cisterna para el llenado de depósitos particulares y contenedores de menor tamaño. Según se puede leer en el Bando, se desplazará por esta población “en horario de 9 a 14 horas de lunes a sábado”. Gemalsa, en el momento, gestionó el suministro alternativo y desde entonces se está llenando el depósito.
Según han explicado desde el consistorio lojeño, los vecinos de Venta del Rayo no se están viendo afectados por esta turbidez debido a que se ha puesto en marcha un segundo punto de suministro, el llamado ‘Pozo de los Guerrero’. Según ha afirmado en redes sociales el alcalde, Joaquín Camacho, esta captación se ha conseguido poner en marcha “después de mucho tiempo gestionando con la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y Sanidad”.
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