Primer día de los refugiados ucranianos en Loja. Tras la llegada ayer a nuestro municipio tras más de 3.500 kilómetros de viaje se les ha dejado descansar en sus habitaciones del Hotel Abades. Desde el principio se necesitó atención a un mayor que mantiene problemas estomacales y a menores que venían con fiebre durante todo el viaje.
Las primeras horas han venido marcadas por esa atención sanitaria. A todos ellos se le han realizado pruebas para la detección del COVID y en este caso se cuenta con algunos positivos que están aislados en sus habitaciones. También se insiste en la atención a los pequeños con procesos febriles y en la realización de pruebas a la persona de avanzada edad para determinar sus problemas gástricos. Además, una de los canes que venían como mascotas de las familias en el autobús está embarazada y según una primera revisión podría dar a luz en la jornada de mañana.
Reseñar que tres de las 18 familias han decidido acudir a otros puntos de España. Es el caso de una familia que contaba con un menor con parálisis cerebral que han acudido con unos familiares de Valencia. Partieron en el tren de las 13:40 horas desde nuestra localidad. Las otras dos familias han acudido a Madrid. Una de ellas cuenta con conocidos en esta ciudad y la otra ya tenía contacto con una familia de acogida.
Hoy se pretende mantener un día más de descanso en el hotel antes de comenzar a realizar diferentes gestiones administrativas. Mañana sábado a las 11 horas se ha programado una reunión con un responsable jurídico de Cruz Roja que les informará sobre los trámites a seguir para poder trabajar en España y adquirir diferentes derechos. Por otro lado, a las 12 horas en el CIC El Pósito, se llevará a cabo una reunión con las diferentes familias de acogida lojeñas que se han inscrito en la Oficina de Turismo.
Comienza hoy un fin de semana donde se definirá el futuro inmediato de estas familias que han tenido que abandonar todo. A más de 4.000 kilómetros de su tierra solo piensan en el mañana y en una vuelta que no depende de ellos. Loja es ahora su casa, su refugio.
