El municipio supera in extremis un año más los problemas de escolarización que sufre cada curso. El problema social de fondo, que afecta también a la educación, sigue presente sin poder obviar como muchos padres deciden escolarizar a sus niños fuera de Loja para evitar determinados centros. A pesar de ello, se gana un nuevo año al evitarse el temor de aumentar la ratio de alumnos por clase, máxime en el momento que vivimos de crisis sanitaria provocada por la COVID-19.
Esa nueva prologa la posibilitó una llamada de la delegada de Educación de la Junta de Andalucía en Granada, Ana Dolores Berrocal, al alcalde de Loja, Joaquín Camacho, en la que le anunciaba que el municipio mantendría todas sus unidades educativas. Este anunció, que llegó ayer por la mañana, significa que los cinco centros educativos de la ciudad no verían superar en 25 alumnos cada una de sus aulas. Tampoco el curso de Tercero de Primaria del CEIP Pérez del Álamo, cuyos padres protestaron al ver 27 alumnos para el próximo curso. En este caso concreto, uno de los nuevos alumnos no llegó a matricularse y el otro deberá de inscribirse en otro centro donde no se supere la ratio.
Esta buena noticia, aunque no definitiva para la escolarización lojeña, llegó posteriormente a la reunión mantenida por el alcalde con todas las AMPAs de la ciudad. En ella, el regidor se posicionó al lado de los padres, defendiendo el sentido común, y con el fondo de la vuelta a un nuevo curso donde ya incluso de habla de bajar el número de alumnos por aula. Camacho informó directamente a estas asociaciones de padres de la solución a esta problemática y despejó las dudas que existían de contar con aumentos de ratios en varios centros de la ciudad.
Tras la llamada de la delegada, Camacho mostró su satisfacción de lograr desbloquear esta problemática tras lo que entiende han sido dos semanas de trabajo con la Delegación y técnicos. En ese sentido afirmó el Gobierno Local siempre ha estado al lado de los padres, dejando al lado opciones partidistas.
A pesar de ello, el regidor fue muy crítico al entender que esto no soluciona el problema de fondo de la escolarización en Loja. Camacho entiende que hay que trabajar para lograr un modelo propio para la ciudad y no poner parches que no logran una normalización real. “Tenemos que lograr un modelo integrador”, comentó el primer edil no escondiendo el problema social que lo engloba. Camacho afirmó que no mirará para otro lado en este problema y que la solución parte de la unidad de toda la comunidad educativa del municipio.
