Una de las cosas que más sorprende de la exposición que protagonizan durante estos días los miembros del Taller de las Artes Expositivas (TAEX), y los alumnos del Curso de Fotografía Creativa de la Universidad Popular, bajo el título “Abstracción”, es la gran cantidad de miradas que se esconden tras los numerosos objetos cotidianos que nos rodean.
Las innumerables perspectivas, los sorprendentes colores, las inexplicables texturas que se multiplican por doquier y que, en muchos casos, precisan de la visión recreadora de sus interpretes para que alcancen ese ámbito que las eleva al rango de obra de arte.
Pero no es sólo eso lo que puede satisfacer la curiosidad del espectador, sino también la amalgama de microproyectos individuales que, en suma, configuran una compleja, dinámica y sorprendente miscelánea que nos hace soñar, que nos evoca momentos y lugares compartidos, o nos provoca las más sugerentes imágenes.
Al fin y al cabo se trata de eso, de remover nuestros sentidos y preñarlos de sensaciones.
En total, en esta tercera edición de la muestra TAEX se reúnen unas 50 fotografías tratadas con la máxima libertad y criterio técnico, que han sido alumbradas, al mismo tiempo, de la reflexión y, en no pocos casos, la poética de sus autores.
Veinticuatro hombres y mujeres que tienen en la fotografía, unos profesionalmente y otros como aficionados, una vía de expresión llena de recursos y posibilidades.
De ellos, una docena ya pertenecen al grupo desde su nacimiento, y otra docena han crecido fotográficamente bajo los buenos consejos de Marietta Arco en el curso de la Universidad Popular.
Unos y otros disfrutaban el día de la inauguración de la muestra con los muchos asistentes que acudían, entre los que se encontraban el alcalde de Loja, Joaquín Camacho, el concejal de Cultura, José Antonio Gómez, o el comisario de la exposición, Juan Alonso Sánchez.
Entre miradas y miradas las sonrisas ponían un punto de frescura y armonía aún mayor en sus rostros, y se dejaban querer.