¿Cómo será el Carnaval de Loja dentro de 50 años? ¿Cómo estará la ciudad en 2068? ¿Y qué cambios habrá sufrido el barrio Alto lojeño después de haberse independizado? Bajo este disparatado hilo argumental, José Padilla Pérez, conocido popularmente como José ‘Pío’ pregonó las fiestas de don Carnal de 2018. Lo hizo en el Teatro Imperial con un público entregado que no paró de reír a carcajadas con un espectáculo en el que también se vivieron momentos emotivos junto a su familia y hubo tiempo para reivindicar los valores de la fiesta carnavalera.
Dentro de 50 años, el barrio Alto de Loja será una “república independiente”. Sus dominios estarán gobernados por un excéntrico y populista alcalde que tendrá una enemistad más que manifiesta con el primer edil Loja. Éste, por cierto, seguirá siendo Joaquín Camacho, aunque eso sí, mucho más envejecido. Son dos de los personajes de este hilarante espectáculo en el que ‘Pío’ contó, además, con la colaboración de sus hermanos Emilio y Mari Carmen Padilla y de la murga de Kika Montoro.
Una de las escenas más surrealistas y entretenidas de la noche las coprotagonizaron el alcalde Camacho y el secretario general socialista, Gonzalo Vázquez. Camacho entró por un peculiar “túnel del tiempo” en la casa de los ‘Píos’ –los Píos de dentro de 50 años-. Allí, le sorprendió la muerte; nada pudo hacer Vázquez, médico de profesión, para reanimarlo. Ante esta situación, los hermanos se “quitaron el muerto de encima” llevándoselo en volandas del escenario.
En torno a una mesa de camilla, leyendo las páginas de un periódico dieron a conocer las noticias de la hipotética Loja del futuro para constatar que, dentro de 50 años, las cosas no cambiarán demasiado: la estación de autobuses seguirá siendo la cristalera de la piscina Yola y el AVE, todavía, nada de nada. En cambio, en el barrio Alto de 2068, el bar Mari Trini será el referente gastronómico de la “república independiente”, que además tendrá una peluquería 24 horas regentada por Morcillón.
En su pregón, José Padilla rememoró sus inicios en el Carnaval, ya desde pequeño cuando acudía con su padre a la Peña de la Orza para acompañar a la murga carnavalera por las calles y bares del barrio Alto. Manolo ‘Pío’ ha sido, según su hijo, “el responsable de sus devociones y sus aficiones”. Padilla no dudó en brindar el pregón a su padre.
Los primeros años de José Padilla en el mundo de las agrupaciones carnavalescas están relacionados con la primera murga infantil lojeña, la de la Peña de los Amigos. En 1992 salió en la primera agrupación adulta, la de la Peña de la Orza, dirigida por Pedro Lanzas. “La Colombina” era una de las coplas que había que escuchar obligatoriamente todos los años. José y Emilio se arrancaron a cantarla.
El pregón de Pío también sirvió para reivindicar el Carnaval y sus valores. Para José Padilla, es la “fiesta de la libertad, de las letras, el Carnaval está para que podamos decir todo lo que pensemos en libertad, sin ataduras, es la fiesta de la ironía y de la poesía cercana”.
Por cierto que al final la historia acabó bien, con los dos alcaldes, el de Loja y el del barrio Alto, firmando la paz. Hasta se votó por unanimidad que ambos dominios se hermanaran. No fue esta la única sorpresa de la noche, ya que el edil lojeño anunció que la próxima Junta de Gobierno local aprobará que la plaza de Santa Catalina, la que acoge cada año el Domingo Teoletero, sea rebautizada como ‘plaza del Carnaval de Loja’.
GALARDONES
Antes del hilarante pregón de José Padilla se entregaron las dos distinciones de la Asociación Lojeña de Carnaval. Por un lado, el colegio Caminillo recibió la ‘Máscara del Carnaval’ por su contribución a este festejo, enseñando a muchos de los chirigoteros y comparsistas de las últimas décadas. Para celebrarlo, representantes de las 18 clases del centro cantaron la letrilla conmemorativa del 50 aniversario del colegio, disfrazados con los tipos que lucirán este Carnaval. Con el proyecto ‘Ningún niño sin cantar, todos los alumnos entonarán los temas elaborados por diversos letristas y músicos locales.
El otro galardón fue para Flor González, que recibió el ‘Antifaz de Oro’. Es una voz más que conocida en la ciudad y, además, componente, directora musical y autora de los temas de la ‘Comparsa de las Niñas’, que marcó un antes y un después en la fiesta carnavalesca lojeña. González recordó emocionada sus comienzos en 1999 con esta agrupación y agradeció a “sus niñas” todo lo vivido y aprendido juntas. Ellas la sorprendieron con un vídeo que trajo a la memoria de todo el público los recuerdos del Carnaval de las últimas dos décadas.