El pleno de la Corporación Municipal de Loja vivió este pasado jueves una de las sesiones más largas de su historia. En total, fueron cinco horas, finalizando cerca de la 1.30 de la madrugada. Y es que el orden del día recogía nada menos que 34 asuntos, que se debatieron, nuevamente, en una tensa noche.
Entre los principales puntos que recogía la sesión, uno de los más destacados era el de la concertación de una operación de crédito, por valor de 3.336.800 euros, que permita finalizar la obra del Centro Deportivo Urbano, el complejo de piscinas cubiertas que el Equipo de Gobierno confía abrir a finales del próximo año 2019.
Como explicó el alcalde lojeño, Joaquín Camacho, durante su exposición, el Centro Deportivo Urbano “es una de las prioridades de este Equipo de Gobierno”. Camacho hizo un repaso por todas las circunstancias que han venido ocurriendo desde qu se puso en marcha este proyecto, desde la liquidación del contrato con la empresa que tenía adjudicada la obra inicialmente, debido a su incumplimiento, pasando por la puesta en marcha de un estudio económico y de mercado para que el proyecto fuera eficiente y rentable social y económicamente. Así, dijo, “se adaptó el proyecto a las necesidades de ese estudio”. A partir de ahí recordó que “después de conseguir hace un año la autorización de la Junta para poder buscar la financiación, el hecho de que la misma llegara ya en los primeros días del mes de enero, hizo que la entidad financiera con la que se había aprobado la operación de crédito, interpretara que no se podía formalizar el préstamo, porque consideraban que era solamente hasta el 31 de diciembre del 2017. Por ello -continuó- no se pudo resolver y se trajo al Pleno una nueva modificación de crédito”.
Ya se contaba con la modificación de crédito, por lo que ahora se traía al pleno la oferta más ventajosa, “mejor incluso que la anterior”, que tuvo que ser descartada. Ahora, la intención es sacar a licitación la obra en las próximas semanas, con el horizonte de tener las piscinas cubiertas a final del próximo año.
Durante el debate, el portavoz del PSOE, Gonzalo Vázquez, señaló que su grupo coincide en la importancia del proyecto y añadió que siempre lo ha querido desde que los socialistas lo iniciaron en 2010. Vázquez reprochó a Camacho que el proyecto no esté ya finalizado a día de hoy “y ahora se vuelva a iniciar un nuevo expediente después de desistir de un préstamo de 3.300.000 euros”. Por eso, anunció que su grupo se iba a abstener en la votación “por la falta de confianza en la gestión de este proyecto”, dijo, añadiendo que “no vamos a ser una piedra que impida que se hagan las piscinas cubiertas”.
Camacho lamentó la postura del PSOE, señalando que “en estos proyectos tenemos que unirnos para que salgan adelante” y sobre los reproches de Vázquez afirmando que el proyecto se podría haber finalizado cuando el PP llegó al gobierno municipal, el alcalde dijo que en 2012 no se pudo terminar “porque no había dinero ni para pagar la luz”, preguntando a Vázquez cómo se iba a gastar el Ayuntamiento 3.300.000 euros sin posibilidad legal de sacar préstamos. “¿Con el sistema del PSOE, de hacer y no pagar?”, le preguntó Camacho.
Gonzalo Vázquez volvió a reprochar a Camacho que parara en su momento el proyecto e insistió en que podrían haber estado finalizadas en 2012. Mientras, el alcalde dijo que los lojeños le habían dado su confianza para sacar proyectos adelante y añadió que el Equipo de Gobierno va a usar esa confianza y su mayoría en el pleno “con responsabilidad”.
Finalmente, el Pleno aprobó la operación con los votos a favor del PP y el concejal no adscrito, Alejandro Ronda, y la abstención del PSOE.