El ministro de Fomento en funciones, Rafael Catalá, el secretario general de Infraestructuras, Manuel Niño, el presidente de Renfe, Pablo Vázquez, y la directora general de Adif Alta Velocidad, Isabel Pardo, se han reunido esta mañana en Granada con representantes institucionales y empresariales de la provincia. Son los máximos responsables de la obra del tren de Alta Velocidad, así como de su explotación y las personas que deben tener las respuestas sobre el futuro del tren en la provincia. Ellos son los que han negociado en los últimos meses con la empresa adjudicataria del AVE en Loja y los que deciden si se retoman las conexiones directas con Madrid y Barcelona usando la línea de Moreda. Por todo eso, es de esperar que el ‘desembarco’ de toda la cúpula de Fomento y sus empresas públicas en Granada sirva para despejar dudas sobre el aislamiento ferroviario que padece la ciudad desde hace ya diecinueve meses. Formalmente, el Gobierno explicó en un comunicado ayer por la noche que la visita del ministro tiene por objetivo «impulsar la solución de la conexión ferroviaria de la ciudad por Alta Velocidad». Dicho así, parece que se refiere al contrato bloqueado en Loja.
Han mantenido una primera reunión con cargos institucionales. En concreto, en el encuentro han estado el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz; la subdelegada del Gobierno en Granada, Eva Blanco: el alcalde de Granada, Francisco Cuenca (PSOE); el senador por Andalucía y presidente de los populares andaluces, Juan Manuel Moreno Bonilla; el senador por Granada Sebastián Pérez (PP); y los portavoces de los grupos municipales de la capital del PP, PSOE, ‘Vamos, Granada’, Ciudadanos e Izquierda Unida.
Los portavoces de los grupos municipales habían pedido hace una semana, por enésima vez, una reunión con el ministro de Fomento, para aclarar la «dramática situación que supone para la ciudad estar durante casi 600 días aislada por ferrocarril del resto de España», según el escrito que enviaron.
En total, unas catorce personas se reunirán en la subdelegación del Gobierno para abordar las abundantes interrogantes abiertas que tiene el proyecto ferroviario de la capital. Después de este primer encuentro está previsto que mantengan otra reunión con los representantes empresariales de Granada, encabezados por Gerardo Cuerva, presidente de la Cámara de Comercio y de la Confederación Granadina de Empresarios. Y, por último, el ministro visitará las obras del AVE.
Entre los asuntos a los que se espera que ofrezcan una respuesta, el que más incertidumbres presenta es el de las obras de la Alta Velocidad en Loja. El contrato se adjudicó en noviembre de 2014, pero en enero de 2016, tras múltiples retrasos, se quedó parada la obra. La UTE adjudicataria, formada por empresas del Grupo ACS, abandonaron los trabajos como medida de presión, ya que habían solicitado un incremento del presupuesto por encima del 10% legal. Al no concedérsele, este verano solicitaron formalmente la rescisión del contrato. Adif les ofreció un modificado que no superaba el 10%, pero han transcurrido varias semanas sin que se sepa nada. Las dos alternativas posibles son la rescisión del contrato, o llegar a un acuerdo.
