El Centro Deportivo Urbano deberá esperar un poco más para obtener la financiación necesaria para concluir las obras. El Ayuntamiento de Loja ha iniciado de nuevo los trámites necesarios para solicitar un préstamo de 3,3 millones de euros con el que concluir el proyecto, paralizado en 2012 por la crisis económica. De esta forma, se desestima la operación con Cajamar, la entidad que había presentado las mejores condiciones, después de que se haya negado a formalizarlo al considerar que su oferta solo estaba vigente para 2017.
El proyecto pierde así un año entero de procedimientos administrativos para buscar la financiación. El año pasado, el gobierno local decidió que la mejor forma para concluir el edificio, que contendrá dos piscinas cubiertas, un amplio gimnasio y pistas deportivas de tenis y pádel, era pedir un préstamo. Esta decisión contaba, en primera instancia, con el beneplácito de la Intervención municipal, que certificaba que el Ayuntamiento cumplía los requisitos económicos para solicitar el dinero. El segundo paso era conseguir la autorización de la Consejería de Hacienda, que en un primer momento lo desestimó al considerar que no se ajustaba al principio de prudencia financiera. Ello obligó al Ayuntamiento a volver a licitar el préstamo. Esta vez se adjudicó a Cajamar y Hacienda le dio el visto bueno.
Ahora ha sido esta entidad bancaria la que ha planteado “cuestiones técnicas y políticas” con las que el Ayuntamiento “no está de acuerdo”. Así lo expuso en el Pleno municipal el alcalde lojeño, Joaquín Camacho, quien explicó que la autorización de la Junta llegó el 3 de enero de este año “y Cajamar dice que sus condiciones sólo son válidas para que el préstamo se formalizara en 2017, por lo que se niega a firmarlo”.
La única salida de este embrollo ha sido desistir de esta operación de crédito e iniciar un expediente nuevo, en este caso por valor de 3,38 millones de euros, 400.000 euros menos de lo previsto inicialmente. Es lo que queda por invertir en el Centro Deportivo Urbano una vez que se ha recibido el proyecto que redimensiona los servicios e instalaciones. El alcalde afirmó que 2019 debe ser el año del este equipamiento “que va a hacer de Loja una ciudad aún más atractiva”
DEBATE POLÍTICO
En lo político, este expediente generó un intenso y amplio debate entre el alcalde y el portavoz del PSOE, Gonzalo Vázquez. El socialista expresó las “dudas” que a su grupo generaba esta operación y que les llevó a votar en contra. Recordó que el Ayuntamiento tiene pendiente la resolución de dos contenciosos administrativos, uno contra la Junta de Andalucía –que el reclama la devolución de la subvención que aportó al comienzo de las obras al considerar que el dinero no está invertido- y otro contra la empresa que comenzó los trabajos, que exige al consistorio un millón de euros.
Por otro lado, el portavoz socialista se interesó por el coste total del Centro Deportivo Urbano –tanto lo que cuesta finalizar el proyecto como lo que ha supuesto su redacción y el estudio de mercado- y alertó de que el préstamo que se solicitará “será el mayor de la historia del Ayuntamiento de Loja”. Además, acusó al alcalde de “dejadez” por no haber hecho “nada” para continuar con el proyecto desde que se paralizó en 2012. “Ahora le entran las prisas para poder inaugurarlo antes de las elecciones municipales del año que viene, cuando en los últimos seis años no se ha hecho nada”, criticó el portavoz socialista.
El alcalde aclaró las dudas de Vázquez, en primer lugar negando las acusaciones de “dejadez”. Camacho dijo que en todo este tiempo “no se ha parado de gestionar a nivel técnico y político” y que si el préstamo no se ha pedido antes ha sido porque “no había dinero para terminar un edificio de 3,3 millones cuando el Ayuntamiento no tenía liquidez, nos cortaban la luz y se debían ocho millones a proveedores”.
En cuanto a los contenciosos administrativos en marcha, explicó que el que hay contra la Junta lo ha promovido el propio Ayuntamiento “porque está acreditado por los técnicos municipales que la subvención está invertida”. Sobre el de la empresa dijo que con la liquidación de la obra debía recibir 100.000 euros, “y no el millón que pide, por lo que el tema hay que pelearlo en los juzgados”.
Por otro lado, Camacho aclaró que la redacción del proyecto y el estudio de mercado han costado en torno a 45.000 euros y negó las prisas a las que se refería Vázquez: “Fíjese si tenemos prisa que hemos perdido un año de gestiones y ahora vamos a iniciar el expediente de nuevo”, espetó irónico al socialista.
Finalmente, el expediente salió adelante por mayoría, con los votos del Partido Popular y del concejal Alejandro Ronda, mientras que el PSOE votó en contra.
