Desde el área de Servicios y Mantenimiento del Ayuntamiento de Loja se actuó, recientemente, en el conocido camino rural del Jardín de Narváez, muy transitado por los numerosos vecinos que habitan en esta zona a las afueras de la ciudad y por los agricultores que asisten a sus plantaciones.
Concretamente, la intervención de un día consistió en echar una capa de alquitrán en caliente para parchear aquellas superficies que estaban en peor estado de conservación a lo largo de 700 metros de carril. “Una actuación muy demandada por las personas que utilizan a diario este camino, vecinos, agricultores y por los vehículos pesados que entran y salen todos los días de una nave de manufactura agrícola”, explicó el concejal de esta área municipal, José Antonio Gallego.
Para el arreglo del pavimento en peor estado se necesitó una bañera de unas 23 toneladas de aglomerado que “no le supone a las arcas municipales una gran inversión, pero para la gente que utiliza esta vía les soluciona un problema grave en el asfaltado”, aseguró.
Gallego también informó que estos días se trabaja en la parada provisional de autobuses de la piscina Yola, donde se construye una acera de 1,80 metros de ancho para que los ciudadanos puedan transitar con tranquilidad. “Cuando se termine el acerado, se instalará una marquesina semiabierta que hemos comprado desde esta área para que las personas estén salvaguardados de las inclemencias del tiempo”.
A continuación, se actuará en la segunda fase de terminación de la mediana de la Avenida de Andalucía, existente en la entrada a Loja por Granada, y que va desde la rotonda de cuatro vientos hasta la subida del barrio de San Antonio. “Se trata de actuaciones previstas que las hemos empezado casi al mismo tiempo, porque es cuando hemos podido”, afirmó el edil.
El alcalde de Loja, Joaquín Camacho, que también visitó la actuación en el camino del Jardín de Narváez, manifestó que “nos encontramos ante una de las actuaciones más necesarias de los últimos tiempos y que este equipo de Gobierno ha considerado una prioridad por ser muy utilizado por muchos vecinos”.
Según apuntó el primer edil lojeño, este año se destinó en el presupuesto municipal una partida de 30.000 euros más para incrementar los fondos propios del Consistorio, dirigidos a actuaciones de mantenimiento que “no son grandes obras pero que resuelven problemas importantes, como los baches de este camino muy transitado por gente y vehículos de alto tonelaje lo que hace que se deteriore muy rápidamente”.
A la vez recordó que el término municipal cuenta con más de 400 kilómetros de caminos rurales, lo que dificulta una intervención completa, pero “tenemos claro que hay que trabajar en colaboración con los vecinos”, como se hizo en Ventorros de La Laguna, Ventorros de San José, Torreagicampe, La Fábrica, etcétera, ya que “consideramos que el desarrollo agrícola en nuestra ciudad es fundamental”.
A parte de esta intervención puntual, Camacho informó sobre la solicitud a la Diputación de Granada de una subvención del programa de arreglos de caminos vecinales, como el de los Gallumbares, por una cuantía que ronda los 70.000 euros. En 2015, el Ayuntamiento de la localidad invirtió 100.000 euros para el arreglo de un tramo, por lo que espera que “la Diputación conceda esta ayuda a una vía con bastantes deficiencias”.
