El Ayuntamiento de Loja, a través del área de Urbanismo y Obras, acometió ayer la última actuación para finalizar las obras de reurbanización integral de la calle Huerta Gálvez, en la parte alta de la ciudad. Concretamente, ayer concluían los trabajos de asfaltado del último tramo de vía con salida a la Avenida de Andalucía, por lo que -desde hoy- ya está abierto al tráfico rodado.
Se trata de una de las grandes obras del Programa de Fomento de Empleo Agrario (PFEA) 2018 en una de las barriadas lojeñas donde no se intervenía desde hacía décadas. Según aseguró el concejal de este área municipal, Joaquín Ordóñez, los trabajos se han desarrollado durante cinco meses y ha sido una de las intervenciones que “más problemas nos ha dado a nivel técnico por tratarse de una calle que no tenía apenas infraestructuras subterráneas, junto a una mala planificación urbanística, lo que ha dificultado la obra”.
Además de la sustitución de las antiguas canalizaciones de abastecimiento de agua y saneamiento, se instaló una red pluvial que no existía y se construyó nuevos acerados y la pavimentación del firme.
La actuación se ha desarrollado a lo largo de 500 metros de calle, desde los escaloncillos que suben a Mariana Pineda hasta la entrada por el antiguo restaurante Alcazaba, en una barriada que nació en el extrarradio de la ciudad con estética desordenada. “Muchos metros de actuación, donde se ha dejado preparada la calle para el futuro y se ha reformado el vial tanto por dentro como por fuera”, apuntó el alcalde de la ciudad, Joaquín Camacho, quien añadió que “estamos actuando en aquellas zonas que necesitan una mejora” como también fue el caso de Mariana Pineda y en próximas fechas calle Sol.
Para reforzar y dar agilidad a la obra, Ordoñez informó -en su día- de la contratación de cinco oficiales de la bolsa de trabajo municipal para apoyar “el Plan y darle más celeridad a los trabajos urbanísticos”, a los que se sumaron los servicios del área municipal de Mantenimiento y de la empresa pública Gemalsa. La actuación integral contó con una inversión superior a los 300.000 euros, entre mano de obra y materiales.
