El Sorteo de Navidad de este 2013 ha traído la suerte y la felicidad a muchos lojeños. El 52.754, el último quinto premio del sorteo, se ha vendido íntegramente en la ciudad. En concreto, en Administración número 1, ubicada en la Plaza de la Constitución, y que regenta María Josefa Burgos Fregenal.
La administración disponía de 160 series del afortunado número. Finalmente devolvió dos, por lo que se han vendido 158. Ello supone que se han repartido 9.480.000 euros en premios: 60.000 euros a la serie y 6.000 al décimo, antes de impuestos.
Un premio que salió a las 13:10 horas en el octavo alambre de la novena tabla. Ha sido cantado por los niños Shirley Fonseca y Álex Chertes, mientras que Aroa Patricio Vaquero y Lisandro Tapia Moya extrajeron las bolas.
Ha sido un premio muy repartido. Además de en la ventanilla de la Administración, la mayor parte de los décimos se ha vendido en diferentes establecimientos del grupo lojeño Abades. También se han llevado un pellizquito 16 trabajadores del Grupo Riofrío. Además, el Centro de Día de Personas Mayores de la localidad Santa Cruz del Comercio ha vendido 15 series.
El 52.574 es un número fijo de la Administración de Josefa Burgos, quien ha indicado que “hace más de doce años que este número se vende siempre por Navidad”. Sin duda, la alegría se ha adueñado hoy este despacho de Loterías en donde se han citado a mediodía numerosas personas afortunadas y otras curiosas para participar de la emoción de la jornada.
El primero de los afortunados en acudir a la Administración ha sido Emilio Rodríguez, al que sin duda el premio le ha venido como caído del cielo. Es electricista y ahora mismo se encuentra sin empleo. “Lo compré el viernes pasado, dos días antes del sorteo. Pedí el número al azar. Es la primera vez que me toca algo”, confiesa el agraciado, sin poder ocultar su alegría y enseñando una fotografía del décimo en su teléfono móvil.
María José Trassierra es otra de las afortunadas. Ella jugaba con otros 16 compañeros de trabajo, del Grupo Riofrío, el número de la suerte. Un número que llevaba jugándose más de 30 años en este establecimiento. Sin embargo, este año decidieron prescindir de él al creer que no se iba a vender por la crisis. “A pesar de ello, varios compañeros decidimos ir a la Administración a por varios décimos de este número, para no perder una costumbre que del año 1982. Y al final nos ha tocado”, comenta orgullosa y feliz María José. Con lo ganado, 4.800 euros tras quitar el 20% que se lleva Hacienda, ella y su marido ayudarán a su familia y disfrutarán de un crucero por los Fiordos noruegos.
Paula, Carmen, Irene o Miguel son algunos de sus compañeros a los que también ha sonreído la suerte. Ellos también se irán se irán juntos de viaje, aunque a un lugar más lejano: a Punta Cana. Hoy en su trabajo todo era alegría y felicidad, que han compartido con sus clientes. Sin duda, un premio caído ‘como agua de mayo’ ya que muchos de estos trabajadores están pasando por dificultades económicas.
Pero donde más se ha repartido la suerte, sin duda, ha sido por varios establecimientos del grupo lojeño Abades. Un total de 1.200 décimos fueron vendidos a trabajadores y clientes de los distintos restaurantes, gasolineras y áreas de servicio de municipios como Loja, Guadix, Pulianas o Huétor Tájar. Son 7,2 millones de euros de los 9,5 que se han repartido en total.
Parte del premio ha viajado fuera de Loja, ya que han sido muchas las personas que se han llevado algún número cuando han visitado de paso estos establecimientos. “Nos ha llamado mucha gente de fuera, de Murcia o Badajoz, para asegurarse de que había tocado”, comenta Juan José Montalbán, encargado del restaurante El Mirador, donde se han vendido 40 series. Él ha sido uno de los agraciados, junto con otros 250 compañeros del grupo.
Los trabajadores del área de servicio Los Abades también jugaron 10 décimos del número de la suerte, cuatro de forma individual y los otros seis entre varios compañeros. Ángel García, el encargado del establecimiento, ha sido uno de los afortunados. “Ahora a disfrutarlo y a gastarlo en esta Navidad”, comenta.
La alegría también era la protagonista en la pizzería El Atracón. Su propietario, Francisco Ruiz Cantano, también ha sido agraciado con este quinto premio. “Fui a pelarme a la peluquería de la plaza de la Constitución y me acordé de comprar varios décimos. Compré tres, sin fijarme en los números”, explica Paco, quien hizo partícipe de su alegría a amigos y a los medios de comunicación a los que invitó a comer.
La suerte también ha viajado a la pequeña localidad de Santa Cruz del Comercio, de alrededor de 500 habitantes. Allí se han vendido 150 décimos del 52.754, por lo que este quinto premio ha dejado 900.000 euros.
La jornada dejó infinidad de momentos felices a muchas personas del municipio y también de fuera, en un quinto premio, el de menor cuantía, que ha sido muy repartido y que a buen seguro supondrá un gran alivio a todos los agraciados.