La Policía Local de Loja cuenta desde hace unos días con dos nuevas motocicletas para las labores de patrulla, que vienen a reforzar a las otras tres con las que cuenta el cuerpo de seguridad lojeño. Estos nuevos vehículos, de marca Kymco y homologados con los correspondientes dispositivos de sirenas y rotativos, tienen una cilindrada de 300 CC, la suficiente para el uso que van a tener “ya que de lo contrario generan muchas averías”, explicó Elena Ortiz, jefa de la Policía Local. Se han adquirido en una empresa de Loja y han tenido un coste de 6.000 euros cada una.
Estas dos motocicletas, más las tres que había, se unen a los tres coches patrulla, una furgoneta de la unidad canina, además de la grúa y otro vehículo de señalización vial con los que cuenta el cuerpo de seguridad lojeño. Un parque móvil policial “suficiente” según Ortiz para el servicio que prestan los agentes a la ciudadanía. “Siempre se puede aumentar, pero por la situación económica que tenemos es aceptable”, indicó la jefa de la Policía.
Para el edil de Gobernación, José Barea, con estos nuevos vehículos “se apoya por parte del Equipo de Gobierno a nuestra Jefatura, fortaleciendo sus recursos materiales con el objetivo de mejorar la seguridad de los lojeños”. El concejal también se refirió a las mejoras que se han realizado en el vehículo grúa, que ha renovado su imagen.
El alcalde Joaquín Camacho destacó la necesidad de que el cuerpo de seguridad municipal tenga los suficientes recursos para prestar su servicio, que se ve mejorado con la compra de estas dos motos “en las que se han invertido 12.000 euros de fondos propios, gracias al resultado de la buena gestión económica realizada en los últimos años”. El primer edil lojeño tuvo palabras de elogio para los agentes, que prestan un servicio “de gran calidad”. “Loja ha evolucionado en relación a la seguridad, y eso es importante resaltarlo públicamente”, apuntó Camacho.
El Área de Gobernación del Ayuntamiento de Loja lleva varios meses trabajando en la implantación de un sistema de videovigilancia en el municipio, que estará centralizado en la propia Jefatura policial. Se ha iniciado ya una primera fase, con la dotación de equipos en los alrededores de la sede de la Policía. La idea es instalar varias cámaras de seguridad en puntos estratégicos de la ciudad con el objetivo principal de controlar el tráfico rodado, aunque también se podrán advertir y dar respuesta a posibles delitos que ocurran en la vía pública. Para ello se ha previsto una segunda fase, a implantar en las próximas semanas, con un presupuesto de 21.000 euros.