El Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía declarará hoy Zona Especial de Conservación (ZEC) a la Sierra de Loja, al mismo tiempo que a una veintena de ecosistemas de la Comunidad. La obtención de esta figura de conservación natural tendrá, sin duda, buenas consecuencias para la preservación y mejora de los ecosistemas existentes en ella, además de ofrecer oportunidades económicas al municipio y comarca a través de la sostenibilidad. Ganadería y agricultura ecológicas y un turismo de calidad a través de actividades en la naturaleza como el senderismo o el vuelo libre, son algunas de las actividades que pueden tener mayor potencial.
Los terrenos incluidos en la ZEC corresponden en un 58% de los casos a montes públicos, cuya titularidad pertenece a entes locales. Además, son numerosas las vías pecuarias que discurren por el interior de la ZEC, alcanzando un total de 113,02 km.
Dichos están clasificados por los diferentes instrumentos de planeamiento urbanístico como suelo no urbanizable y suelo no urbanizable de protección especial. Un aspecto destacable es que ningún núcleo urbano se localiza en el interior de los límites de la ZEC.
Son cuatro los municipios incluidos en esta zona especial, Loja, Alhama de Granada, Salar y Zafarraya. La población total de dichos municipios, que engloban el espacio red Natura 2000, es de 32.026 habitantes, según las cifras del Padrón municipal a 1 de enero de 2013. El municipio que mayor contribución tiene al total poblacional es Loja, con un 66%, seguido de Alhama de Granada (19%). En cuanto a las densidades de población que presentan los municipios que constituyen el ámbito del Plan, cabe destacar que todos se encuentran bastante por debajo de la media andaluza (96,8 hab/km2 ), siendo Alhama de Granada el que posee una densidad más baja, con aproximadamente 14 hab/km2 ; seguido de Salar y Zafarraya, con 32 y 34 hab/km2 , respectivamente. El municipio con mayor densidad es Loja, que presenta valores próximos a 47 hab/km2 . Es reseñable la estabilidad en el número de habitantes mantenida en estos municipios en la última década.
Desde el punto de visto económico, la actividad empresarial se concentra en el municipio de Loja, que cuenta con 1.156 empresas activas de las 1.702 registradas en los cuatro municipios, destacando el sector servicios por encima de los demás, con 857 empresas activas en el municipio. 2.3.2. Usos del suelo Predominan los espacios abiertos con escasa vegetación, seguidos de las formaciones de matorral y pastizal. Las formaciones arboladas densas presentan una escasa distribución, aunque más significativas que las superficies cultivadas. El estrato arbóreo se compone principalmente de quercíneas y algunas coníferas. La composición de las formaciones de matorral varía entre el espinar, tomillar y retamar. Las formaciones herbáceas son diversas, distinguiéndose lastonares, majadales y espartales. Los cultivos se presentan de forma disgregada, siendo el cultivo arbóreo de secano el más extendido, donde destacan las plantaciones de almendros y olivos.
Históricamente, esta sierra se ha caracterizado por ser un entorno pedregoso en el que la influencia humana ha sido muy escasa, excepto en los últimos tiempos, donde las canteras y los molinos de viento han ganado terreno, modificando por tanto el paisaje. El aprovechamiento de esta sierra se ha centrado tradicionalmente en la ganadería, para la cual el hombre ha creado multitud de corralitos de piedra para el refugio de ganado y pastores, así como canalizaciones de agua hacia pilones de piedra para abrevar el ganado y dar agua a los pastores. El hombre también ha creado, aprovechando la cantidad de agua que rezuma de la roca caliza de esta sierra, lagunas artificiales de gran tamaño para abrevar el ganado, que han pasado a formar uno de los ecosistemas más importantes de esta sierra, ya que dan agua a multitud de aves, y cobijo a muchos anfibios.
Agricultura
En el presente no se desarrolla gran actividad humana en estas sierras. Existen aprovechamientos agrícolas de secano de escasa entidad diseminados por el territorio en los que se cultiva principalmente almendro y olivo.
Ganadería y caza
La ganadería sí tiene una mayor presencia en esta sierra, destacando la raza autóctona de oveja lojeña, concocida localmente como rabúa.
La actividad cinegética está muy implantada en esta sierra, ya que engloba uno de los cotos de caza menor de carácter público más extenso de la provincia de Granada. En él se cazan diversas especies en las distintas temporadas cinegética, tales como perdiz roja, conejo, paloma torcaz, liebre y zorzal.
La caza mayor en la sierra de Loja es reciente. El macho montés es la especie más emblemática y única del coto, y según el plan técnico de caza aprobado por la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, son seis los trofeos de macho montés que pueden abatirse por temporada cinegética, además de tres machos selectivos y seis hembras.
Sector turístico
La sierra de Loja es utilizada, asimismo, para la práctica de diversos deportes alternativos, como la escalada libre, posible gracias a los numerosos tajos y cortados calizos que existen en su orografía. Otros deportes importantes que se practican en la zona son: mountain-bike, parapente, ala delta y senderismo. La Ruta de los Pescaeros de Loja, por ejemplo, es una ruta senderista que tiene su origen en un penoso oficio que desapareció a principios del siglo XX y del que se tiene constancia en Loja desde finales del siglo XV. Se trata del transporte y comercio de pescado. El marco geográfico en el que se desarrolló esta actividad fue el camino que une las poblaciones de Loja y Torre del Mar
Climatología
La sierra de Loja se encuentra bajo la influencia del bioclima Pluviestacional Oceánico, el cual sigue pautas generales mesomediterráneas con ombrotipo seco-subhúmedo, caracterizado por tener veranos secos y cálidos e inviernos fríos (con heladas) y lluviosos. Las precipitaciones son abundantes al oeste de la ZEC, alcanzando valores en torno a los 800-1.000 mm/año. Esta abundancia de precipitaciones disminuye hacia el Este, llegando a alcanzar valores medios de precipitación en torno a los 400-600 mm/año. La insolación anual es elevada (3.600-4.000 horas de sol), y el comportamiento de las temperaturas y la evapotranspiración media anual siguen patrones muy similares, siendo ambos parámetros más bajos en las cumbres de la sierra (10-12 ºC y 800-900 mm/año, respectivamente). Estos valores aumentan conforme se desciende en altura en la ZEC, llegando a alcanzarse valores de temperatura media anual de 14-16 ºC, y evapotranspiración media anual en torno a 800-900 mm/año.