Cualquier medida es poca para seguir evitando la aparición de contagios masivos en las aulas de los centros educativos de Loja. Con esa idea, el Ayuntamiento de Loja ha vuelto a invertir fondos propios en la mitigación del frío que alumnado y docentes pasan en clase debido a la necesaria ventilación natural de esos espacios. Mejorar el funcionamiento de la calefacción a la vez que se abren las ventanas es el fin de la instalación de placas de policarbonato.
El Ayuntamiento de Loja ha invertido 3.500 euros en la compra de 20 placas de seis metros de longitud de este material que le permitirá cubrir la totalidad de las ventanas de los centros de Infantil y Primaria de la ciudad y las pedanías. Estas placas se sitúan en las ventanas y cubren más de medio metro de las mismas. Esto permite que el frío no le llegue directamente al alumno que está cerca de las ventanas y facilita una mejor eficiencia de la calefacción. Este método es avalado por diferentes estudios que afirman permite seguir ventilando las aulas y mitigar la sensación térmica que se siente.
Esta medida se une a la puesta en marcha del plan de empleo local para la limpieza extra de los centros educativos que supone una inversión de 120.000 euros. Además se sigue con la desinfección especial de los colegios a través de una empresa local especializada. En cuanto a la purificación del aire cabe recordar la compra de aparatos de filtros por valor de 18.000 euros y que junto a la aportación de algunas AMPAS han cubierto todas las aulas de los colegios del municipio.
El CEIP Elena Martín Vivaldi, centro que se mantiene sin positivos COVID desde el inicio del curso, fue el centro elegido para presentar la colocación de estas placas de policarbonato. En el mismo, el concejal de Educación, José Antonio Gómez, afirmó que el Ayuntamiento está en todo momento pendiente de las necesidades de los centros y aseguró que la idea de colocación de estas placas surgió del coordinador de Obras y Servicios. Gómez afirmó que la medida se ha probado como efectiva ya que se consigue depurar mejor el aire de las clases y bajar los niveles de CO2. “Los indicadores de los dispositivos no se ven tanto en rojo”, aseguró el concejal.
La jefa de estudios de este centro lojeño, Eva Segura, agradeció la colaboración del Ayuntamiento y entiende que estas placas, que se han instalado en todas las aulas, permitirá que el alumnado esté más a gusto y no se quejen tanto. También cree que es importante seguir con las ventanas abiertas a pesar que afirma que los purificadores funcionan perfectamente desde el primer día. “Todo está como debe para que nuestros niños sigan sanos”, comentó la profesional.
Por último, el alcalde de Loja, Joaquín Camacho, reconoció que ante esta pandemia uno de los principales retos era volver con las clases presenciales. En este caso quiso agradecer la labor de los equipos directivos de los centros educativos lojeños, afirmando que se han enfrentado a este reto a veces con pocas herramientas pero con gran ilusión. También habló del ejemplo que el alumnado está dando consiguiendo que la pandemia no sea tan grave en la educación.
Camacho aseguró que ante este ejemplo el Ayuntamiento no tiene otro remedio que colaborar con todo lo que esté en su mano. “Trabajamos para solucionar problemas dentro de nuestras posibilidades”, comentó. En concreto aseguró que en esta semana estarán colocadas estas placas en todos los colegios de la ciudad y las pedanías con el fin de mitigar el frío que aun nos queda que pasar. “Esto es un trabajo de equipo y nosotros seguimos poniéndonos al servicio de los centros para ayudar a que sigan siendo seguros”, sentenció el primer edil.