No más conocerse el avance del proyecto, el Grupo Municipal de Convocatoria por Loja mantuvo una reunión con vecinos de los barrios afectados para explicarles toda la información de la que disponían en ese momento.
El portavoz municipal, Antonio Ramón Molina se refirió a las características de esa iniciativa, en el sentido de que por parte de Fomento se toman en consideración acciones que minimicen las molestias para los vecinos, pero, no obstante, ha reiterado la oposición de su grupo a que se ejecute una obra de carácter provisional con una inversión de 80 millones de euros, dudando en tal caso de su provisionalidad. Insistió en sus tesis, defendidas ya con anterioridad, afirmando que dedicar esa cantidad millonaria a unas obras que no forman parte de la futura variante de Loja “es desperdiciar el dinero, pues esos millones deberían destinarse a terminar el tramo actualmente en marcha entre Quejigares-Venta del Rayo, y acometer el siguiente que llegaría hasta el lugar previsto para la nueva estación AVE de Loja”.
Más adelante, situó en el marco 2014-2020, como fecha idónea para realizar la variante definitiva del AVE a su paso por Loja, por el lugar que se estime más oportuno, contemplado su uso por trenes de alta velocidad, de media distancia y mercancías. Mientras tanto, añadió Molina, “sólo habría que invertir una cantidad mínima para permitir que por el viejo trazado puedan transitar trenes híbridos Talgo 250, lo que permitiría llegar con la alta velocidad a Granada en el plazo previsto, con un tiempo de recorrido entre esta capital y Madrid inferior a las tres horas”, recalcó el portavoz.