Los alcaldes pedáneos de Loja, elegidos en los comicios que se celebraron el pasado 6 de octubre, han tomado posesión de sus cargos en un acto institucional celebrado en el salón de plenos del Ayuntamiento de Loja. Bajo la fórmula de juramento o promesa, los diez recién elegidos representantes de los anejos ante el consistorio lojeño se comprometían a respetar las normas establecidas en el reglamento.
Ocupando el espacio central del salón principal del Ayuntamiento, flanqueados por los ediles del PP y PSOE, bajo la presidencia del primer edil y de parte de su equipo de Gobierno, los nuevos representantes municipales mostraron su disposición altruista y desinteresada para defender los intereses de sus convecinos. El alcalde Joaquín Camacho fue el encargado de dar lectura al decreto de su nombramiento.
Un acto que no estuvo exento de emoción y algunos nervios por parte de los candidatos electos, que fueron llamados uno a uno para subir al estrado donde pronunciaron las habituales palabras de respetar la ley y hacerla respetar. Estos cargos, sin vinculación política -ya que se presentaban a nivel individual y no por partidos políticos-, no tienen remuneración económica sino tan solo algunas ayudas para desplazamientos al Consistorio.
Tras los comicios, en Venta del Rayo resultó reelegida Agustina Lechado, que vencía a su rival Cristino Martínez. En las Rozuelas los vecinos refrendaron de nuevo la candidatura de Antonio Cuéllar, único candidato. La Fábrica tiene nuevo representante, Alejandro Martín, el único candidato que se presentó. Riofrío, por su parte, volvió a respaldar a Alejandro Aguilera como alcalde pedáneo. Venció a los otros dos candidatos, Rosa Peláez y Ángel Cuenca. En Ventorros de San José volvió a ser elegido José Antonio Arco, único candidato. En Cuesta Blanca repite Ramón Gómez como representante vecinal. En Venta de Santa Bárbara resultó elegido Dionisio Rama. Ventorros de la Laguna cuenta con nuevo representante. Se trata de Roberto Aguilera, que se impuso a los otros dos candidatos: Daniel Aguilera y José Prados –alcalde pedáneo en los últimos cuatro años-. Fuente Camacho también estrena representante municipal: María del Carmen Aranda fue elegida por sus vecinos.
Cabe recordar que no se votó, al no presentarse candidatos, en las pedanías de Cuesta La Palma y Ventorros de Balerma. En la primera de ellas, el regidor Camacho ha decidido nombrar a María Teresa Delgado, concejal de Medio Ambiente, como representante vecinal. En Balerma, de momento, esta figura queda vacante.
En nombre de los alcaldes pedáneos tomó la palabra el de Las Rozuelas, Antonio Cuéllar, que agradeció al gobierno municipal su decisión de elegir estas figuras de forma democrática. Además, pidió al Ayuntamiento que “siempre tenga en cuenta a las pedanías”.
Previamente, el concejal de Medio Rural, José Antonio Arco, a su vez alcalde pedáneo de Ventorros de San José, les felicitó por su nombramiento y agradeció el trabajo de los pedáneos salientes. El edil les brindó el apoyo del Ayuntamiento de Loja y subrayó que se cumple una vez más el compromiso del gobierno municipal de que fueran elegidos mediante las urnas.
La ceremonia simbólica finalizó con las palabras de ánimo del alcalde. Joaquín Camacho dijo que los alcaldes pedáneos juegan “un papel protagonista” en el desarrollo y prosperidad de Loja “porque viven el día a día de sus pueblos”. Y añadió que en este caso la dispersión de los núcleos rurales lojeños “enriquece la diversidad del municipio”. Por último, destacó la presencia de las tres alcaldesas pedáneas electas –entre ellas la de Venta del Rayo, Agustina Lechado, que lleva 17 años en el cargo-. “Esto demuestra que la igualdad real en el medio rural es posible, aunque queda aún mucho por hacer”, subrayó el regidor.
FUNCIONES DE LOS ALCALDES PEDÁNEOS
Los ‘alcaldes’ y ‘alcaldesas’ de las pedanías lojeñas tienen diversas competencias municipales y muchas responsabilidades, todo para atender las necesidades y cuestiones que se plantean a los vecinos de unos núcleos que en muchos casos están bastante alejados del casco urbano. Representan a sus vecinos en el Ayuntamiento y, al mismo tiempo, al gobierno municipal y al alcalde en la pedanía. Además, tienen que custodiar las llaves de los edificios municipales; controlar y supervisar los edificios e instalaciones públicas; coordinar las fiestas y eventos del pueblo; distribuir bandos, anuncios y publicaciones municipales; y realizar otras funciones y competencias que, conforme a la Ley, el alcalde les pueda otorgar.
Las pedanías lojeñas cuentan con una población de más de 5.500 habitantes lo que supone una población muy dispersa. Es la tercera vez consecutiva que se celebran estas elecciones en el medio rural lojeño: desde que Joaquín Camacho es alcalde de la ciudad se ha recuperado el sistema de elección por votación vecinal.
El acto finalizó con la foto de familia y las felicitaciones de familiares y asistentes. Desde ahora mismo, estos vecinos empiezan su trabajo por su pueblo.
