El pleno municipal de noviembre debatió dos puntos económicos en el apartado de Hacienda. Se trata, por un lado, de la concertación de una póliza de crédito por valor de 3,9 millones de euros, y del Informe de Morosidad del tercer trimestre de 2025. Ambas cuestiones generaron un amplio debate entre el alcalde, Joaquín Ordóñez, y el Grupo Municipal Socialista.
Sobre la operación de tesorería, el regidor lojeño explicó que “se ha reducido un millón de euros la póliza que se ha solicitado, a la entidad BBVA, con respecto a la del año pasado”, pasando de 4,8 millones a los 3,9 solicitados. Para Ordóñez, eso significa que “hace falta menos liquidez para atender los gastos” que tiene el Ayuntamiento y, además, “demuestra que hay una mejoría en los datos y en los ratios de pago y de deuda con proveedores”.
No lo ve así la concejala socialista Mari López, quien puso en duda la buena marcha de la economía local, citando un informe del tesorero municipal “que alerta de un déficit estructural, que se viene repitiendo hace ya varios años en el Ayuntamiento”. Según la edil, a pesar de que en estos años de mandato del PP “eran los enemigos de pedir préstamos, ahora piden uno de casi 4 millones de euros, que llega a final de año, como la anterior, pero que no va para inversiones, sino para gasto corriente”.
Por otro lado, indicó que “hay empresas que llevan desde abril de 2024 esperando a cobrar sus facturas y, algunas de ellas, incluso que se le reconozcan”. “La situación económica del Ayuntamiento, para nada es buena”, resumió la edil socialista, quien cifró la deuda total del Ayuntamiento en 19,5 millones que, explicó, salen de “los 15,5 millones de deuda con los bancos y cuatro más de deuda con proveedores”.
Según López, esta póliza “viene a aliviar a las empresas, que van a poder cobrar, pero esto no significa que se haga bien, porque se va a endeudar más a la ciudad con un nuevo préstamo que habrá que devolver, con intereses”.
El alcalde Ordóñez reconoció que “la deuda del Ayuntamiento no está para tirar cohetes, pero tampoco está mal” y que existe “margen para hacer inversiones”. Dudó de los datos aportados por la concejala socialista “que no sé de dónde saca” y también del cálculo “un poco extraño” que hizo de la deuda total del consistorio”. También negó que hubiese “facturas en el cajón”, una acusación por parte del PSOE, dijo, “muy grave”. Ordóñez invitó al grupo socialista a una reunión para analizar pormenorizadamente la situación económica actual del Ayuntamiento.
INFORME DE MOROSIDAD
También se habló de la deuda en el punto relacionado con el Informe de Morosidad del tercer trimestre del año. El portavoz del PSOE, Antonio García, expuso que el periodo medio de pago a proveedores había bajado de 107 días a menos de 50 pero que, por el contrario, había crecido el montante de las facturas pendientes de ser pagadas por el Ayuntamiento: “trimestre tras trimestre, la deuda se va incrementando”, apuntó García, para señalar que en primer trimestre “la deuda era de 2,5 millones, en el segundo de 3,3 y en el tercero de 4,26 millones”. Unas cifras que le llevaron a pedir que se estudie “qué está pasando para solventar este problema”.
El alcalde, Joaquín Ordóñez, negó que la deuda estuviese creciendo. “Los datos dicen que la situación se está mejorando, y que se está reduciendo la deuda”, apuntó el regidor, señalando que actualmente el nivel de endeudamiento se sitúa en el 59% “recudiéndose 100 puntos en estos 15 años”.
El primer edil señaló además que se van a seguir haciendo inversiones y que, por tanto, “hay que seguir endeudándose”. Por otro lado, expuso la absorción de la deuda de Emuviloja y las grandes inversiones que se están haciendo, como el parque fluvial, han afectado a la deuda municipal”.
