El Salón de Plenos del Ayuntamiento de Loja acogió en la tarde del pasado jueves el acto institucional con motivo del Día de la Constitución Española, el 6 de diciembre, una cita que cada año reúne a representantes municipales, cuerpos de seguridad, cronista oficial y ciudadanos para conmemorar la aprobación de la Carta Magna de 1978. El acto contó con la intervención de los portavoces de los grupos municipales PSOE y PP, Antonio García y José Antonio Gómez, respectivamente, así como del alcalde Joaquín Ordóñez, con la ausencia de VOX.
La intervención del regidor lojeño ocupó el tramo central y más reflexivo del acto, con un discurso centrado en la necesidad de reivindicar el espíritu de consenso que hizo posible la Constitución y en la obligación de afrontar los retos sociales actuales sin ocultar las dificultades.
El alcalde abrió su mensaje recordando que la Carta Magna supuso “un pacto entre generaciones” que permitió a España “abrir la puerta a una época de unión, responsabilidad y paz”, destacando el papel determinante que jugó para Andalucía en su proceso autonómico. Sin embargo, Ordóñez subrayó que la celebración de la Constitución exige una mirada honesta al contexto actual. “Vivimos tiempos convulsos (…), donde demasiadas personas sienten que la política ha dejado de hablar su idioma”, afirmó. Frente a ello, reivindicó una política concebida como servicio público, “un puente y no un campo de batalla”.
Ordóñez enumeró los principales desafíos que percibe en el día a día del municipio: jóvenes atrapados en la falta de oportunidades, familias que no llegan a fin de mes, mayores preocupados por el deterioro de servicios esenciales y pueblos que luchan contra la despoblación. Todo ello, señaló, requiere un compromiso real por parte de las administraciones.
“El amor a un país no consiste en esconder sus heridas, sino en encararlas y curarlas”, dijo, reclamando que la Constitución sea una guía práctica. Reivindicó que los principios de igualdad, justicia social, cohesión territorial y convivencia democrática deben traducirse en políticas tangibles.
El alcalde centró parte de su discurso en el ámbito local: “La democracia real empieza en los pueblos”. Por ello, defendió una administración cercana, transparente y orientada a escuchar incluso aquello que resulte incómodo. Reforzó el compromiso municipal con la participación ciudadana y con el objetivo de “no dejar a nadie atrás”.
Cerró su intervención apelando al espíritu de entendimiento que hizo posible el texto constitucional de 1978. “Que vuelva a este país la sensatez, el diálogo y la empatía. Que dejemos atrás los gritos y recuperemos la confianza en la democracia”, afirmó.
PSOE
El portavoz socialista, Antonio García, fue el primero en intervenir. Inició su discurso destacando que el Día de la Constitución es, ante todo, una celebración del “triunfo de la democracia y la convivencia entre españoles y entre territorios”. Recordó que la Carta Magna fue fruto del consenso y de la voluntad popular, y que desde su aprobación España ha vivido “el periodo de mayor prosperidad y reconocimiento de derechos de nuestra historia”.
García advirtió del riesgo que supone la reaparición de discursos que idealizan la dictadura, en un año simbólico por cumplirse medio siglo de la muerte del dictador. Subrayó que esos relatos “pretenden engañar a quienes no vivieron aquella etapa de privaciones y represión”.
El portavoz socialista llamó a defender diariamente los valores democráticos, especialmente en un contexto global marcado por el avance de posiciones extremistas que “simplifican la realidad y alimentan la división”. También señaló la desconexión entre parte de la juventud y la política, asociada –dijo- a problemas como el acceso a la vivienda y la precariedad laboral. Concluyó reafirmando el compromiso del PSOE con “una España democrática, diversa y capaz de afrontar los retos del presente sin olvidar las lecciones del pasado”.
PP
El portavoz del PP, José Antonio Gómez, centró su intervención en reivindicar la Constitución como el mayor pacto político de la historia reciente de España, responsable de “el periodo de convivencia en paz y libertad más extenso jamás conocido en nuestro país”. Destacó el papel fundamental del texto constitucional en la modernización institucional y en la consolidación del modelo territorial.
Gómez insistió en la importancia de cumplir la Constitución y no seleccionar sus principios “como si fuera una carta de menú”. Criticó lo que calificó como desigualdades derivadas de “tratos bilaterales” impuestos por los socios del actual Gobierno de España y defendió la unidad de la nación española frente a proyectos separatistas, destacando que la Constitución protege la diversidad dentro de un marco común.
El PP apeló también al espíritu de consenso de 1978, lamentando su ausencia en el clima político actual y llamando a reforzar la autonomía municipal y avanzar en la reforma de la financiación local. Concluyó reafirmando el compromiso del partido con una “España única, próspera y abierta.
Tras las intervenciones de los portavoces y del alcalde, el Ayuntamiento dio por concluida la ceremonia con la interpretación de los himnos de Andalucía y de España, cerrando así un acto que volvió a poner en valor el papel de la Constitución como pilar democrático y como marco de entendimiento para el futuro.
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