Desde la Concejalía de Seguridad Ciudadana han querido salir al paso de las últimas informaciones hechas públicas en una nota de prensa del sindicato CSIF en el que se afirma que el Ayuntamiento de Loja cuenta con la confirmación de hasta cinco infracciones graves en su Parque de Bomberos. Antonio Luis Gómez, concejal del ramo, ha explicado que el consistorio no ha sido sancionado y que lo que tiene sobre la mesa son requerimientos para ser atendidos en un plazo de tres meses. “Son requerimientos como los que realiza cualquier inspección de trabajo en otros ámbitos”, ha comentado Gómez.
Según la documentación facilitada por la propia concejalía, fue el pasado 29 de abril a las 16 horas cuando se efectúa la visita del inspector de trabajo al parque lojeño. Allí constata cuatro acciones a realizar que según la legislación es de obligado cumplimiento. Se reclama formación en materia de seguridad y salud para el uso del camión auto escala, que solo ha recibido el anterior jefe de bomberos, David Castillo. Siendo un mínimo de tres personas las que deben de usar este vehículo y, observándose con posterioridad partes con su uso, se verifica que es preciso la formación del resto de bomberos.
El segundo requerimiento son la falta de periodicidad en las convocatorias y actas de las reuniones del comité de seguridad y salud. La última fecha de su convocatoria y desarrollo fue el 23 de abril de 2024, por lo que no se cumple con su convocatoria de forma trimestral. La tercera medida inspeccionada es el recurso preventivo. Los “recursos preventivos” se refieren a las medidas, equipos y personal que se utilizan para prevenir o minimizar los riesgos asociados con incendios y otras emergencias. En este caso se pide la formación de bomberos que formen parte de este recurso para supervisión de actividades de especial peligrosidad. La cuarta medida observa disparidad de criterios entre el documento de evaluación de riesgos y la planificación preventiva en relación al personal mínimo de intervención en siniestros. Se pide un criterio coherente entre ambos documentos.
Cada una de estas faltas son calificas en el documento de inspección como “infracción grave” y pide su subsanación. Se da de plazo tres meses, que teniendo en cuanta que el requerimiento llegó el 26 de mayo, finaliza el 26 de agosto. Gómez afirma que “es totalmente falso que tengan infracciones graves” y aclara que se trata de requerimientos en los que la “maquinaria del ayuntamiento ya está trabajando” para cumplir en los plazos establecidos. El edil reitera el compromiso del gobierno local por “tener un servicio de calidad que sirva para proteger a la ciudadanía”. El edil cree que esa seguridad no se consigue con “alarmas sociales que se están intentando crear”.
“Este equipo de gobierno sigue trabajando con el interés de los lojeños por encima de todo”, ha comentado Gómez que agradece “al resto de bomberos” que están trabajando como “auténticos campeones” para atender las emergencias del territorio. El edil afirma que se “están dejando la piel” e insiste en que se atiende con más de tres bomberos las acciones de emergencia que requieren más presencia de efectivos. “Reiteramos que lo único que hay sobre la mesa son requerimientos en los que se trabaja para solventar”, ha insistido Gómez.









