La Guardia Civil ha puesto en funcionamiento en Granada seis equipos funcionales encargados de reforzar la respuesta en materia de ciberdelincuencia, en particular ante estafas en la red y que están formados por once guardias civiles, uno en cada una de las compañías que la Guardia Civil tiene en la Comandancia de Granada: Baza, Guadix, Armilla, Loja, Órgiva y Motril.
Asimismo, estos equipos constituyen el primer nivel de respuesta específica a la cibercriminalidad, apoyando a las unidades territoriales que se encuentran orientadas a la ciudadanía, realizando un primer tratamiento de este tipo de delitos, apoyando a la Policía Judicial específica mediante el análisis de los ciberdelitos, y potenciando la interlocución de calidad con las víctimas.
El mayor empleo de Internet ha ido acompañado de una subida de los delitos relacionados con las tecnologías de la información y las comunicaciones. La explicación es clara: el uso de Internet ha experimentado un auge por las medidas de confinamiento y se ha utilizado más la red para gestiones administrativas, transacciones comerciales y relaciones sociales y personales.
En la provincia de Granada, en los primeros nueve meses, se denunciaron 1.706 ciberdelitos frente a los 1.553 que se denunciaron en el mismo periodo del año pasado. Los delitos subieron en un nueve por ciento. De los 1.706 ciberdelitos denunciados en la provincia de Granada se resolvieron 312, un 18 por ciento; mientras que en 2020 de los 1553 denunciados se esclarecieron 249, un 16 por ciento.
El perfil del ciberdelincuente es un hombre de entre 26 y 40 años, y de nacionalidad española.
