Tras dos años de parón, el formato Juveloja no ha perdido tirón entre las comunidades educativas de diferentes localidades de Andalucía. El evento, que llega hoy a su ecuador, suscita una excelente crítica entre docentes y alumnos. Sin duda se ha convertido en una acción fija en la programación educativa de muchos centros.
Juveloja no es solo diversión sino también una fuente importantísima de valores. Además del ocio y el recreo, los jóvenes aprenden a vivir en igualdad, buscar una sociedad inclusiva, respetar el medioambiente, tener una dieta saludable, la importancia del deporte, ser inquietos en el descubrimiento y sobre todo ser compañeros. Una amalgama de buenos principios que acercan al menor a ser una persona más justa.
Todos esos alicientes de Juveloja permiten que los pequeños sean los grandes protagonistas. Ellos son cuidados al detalle por los más de 90 monitores que los atienden en más de 70 propuestas que se reparten por el Pabellón Alfeia, Complejo de Piscinas Genil y Estadio Medina Lauxa. Además, para los monitores es una oportunidad laboral que les permite acercarse a sus inquietudes laborales.
En tres días se van a superar los 5.000 visitantes, de más de 12.000 personas que se espera acudan a la cita. Se han contado con niños procedentes de centros escolares e institutos de las provincias de Málaga, Córdoba y Granada. A ello se suma la participación de los centros lojeños, tanto de la ciudad como de las pedanías, que se reparten a lo largo de la semana.
