El Museo de Anita Ávila no descansa en verano y sigue con sus propuestas culturales y de ocio. Tras la segunda edición de Faralaes, donde se ensalzaba la moda flamenca y todo lo relacionado con este mundo, ahora llega el turno de abrir las puertas del museo de par en par. La denominada como ‘Noche del Museo’ vivirá este viernes 29 de julio su segunda edición.
Será una noche que aunará todo el museo con el resto de la plaza, algo que ya pasó con la anterior propuesta. Una barra de la Real Cofradía de la Santa Vera Cruz, Jesús Preso y Nuestra Señora de los Dolores, facilitará diferentes opciones de bebida y comida para pasar una refrescante velada. Una opción de ocio cultural para disfrutar del inicio del fin de semana.
El espacio museístico de la reconocida y polifacética lojeña podrá ser visitado en todas sus salas de forma gratuita en horario de 20 a 1 de la madrugada. Entre lo expuesto destacará una nueva muestra de relojes. Bajo la denominación de ‘Tic- Tac’ la sala temporal del museo albergará diferentes relojes históricos y de gran valor artístico de la colección personal de Anita Ávila. Sustituye así a la anterior muestra de teléfonos que tuvo gran aceptación.
‘Los Rostros de la Palabra’ del poeta lojeño Juan María Jiménez ocupará el patio central del museo. Este proyecto, que el lojeño arrancó en el 2014 y materializó en el CIC El Pósito en 2017, pretende “democratizar” la poesía para que llegue a todo el mundo. Lo hace a través de un formato audiovisual que hace que el espectador se convierta en poeta e interactúe con la poesía. “Quiero que el espectador que llegue se convierta en poeta y toque para comprender la poesía”, afirma el artista lojeño quien agradece esta oportunidad para una propuesta que ha salido de Loja a municipios como Lucena o Periana y centros educativos como los institutos lojeños y la Facultad de Ciencias de la Educación de Granada.
Jiménez, que expondrá a partir de las 21:30 horas explica que el público pasara por la cabeza del poeta Robert Browning para reconvertirse en un poeta más. El apartado audiovisual tendrá su peso para hacer llegar la poesía desde lo visual y la música, mucha de ella elaborada para la ocasión por lojeños. También se pedirá la interacción del público que incluso deberá de tocar para dar sentido a los versos.
Al margen de estas opciones, se contará con lo que podría denominarse como una gran terraza de verano. En ella se contará con la participación de la asociación ‘Loja por el baile’ que amenizará la noche. Este grupo de amigos se creó hace 12 años y mostrarán diferentes opciones de baile para todas las edades. Su animación y la barra, en la que no faltarán gambas de Apolo, permitirán disfrutar de una gran noche.
