Volver a abrir las aulas de su ‘centro de día’ y encontrarse con sus mesas de actividades dispuestas a recupera la normalidad era un momento muy deseado. Tras casi dos años de parón provocado por la pandemia, los Centros de Envejecimiento Activo del municipio buscan recuperar su necesaria actividad. Los mayores es sin duda el colectivo más damnificado por esta crisis, no solo por los decesos producidos sino también por la pérdida de calidad de vida que en ellos ha provocado.
Desde el Área de Bienestar Social del Ayuntamiento de Loja llevan varios meses preparando la vuelta de las actividades a sus centros de San Francisco, Ventorros de San José y La Fábrica. Será a partir del 4 de octubre cuando arranque el curso con las mismas actividades que cortó la pandemia. Entre ellas destacan: gimnasia de la memoria, manualidades, bailes latinos, canto coral, teatro, escuela, uso del móvil e internet y gimnasia de mantenimiento. Hay diferentes grupos y horarios y al menos hay dos sesiones a la semana, aunque la gimnasia cuenta con tres citas semanales.
La concejala de Bienestar Social, Matilde Ortiz, reseñó que ha sido un parón largo y duro pero que vuelven con gran ilusión. Para la edil no ha sido fácil recuperar la actividad ya que se ha trabajado para gestionar que los centros cuenten con los mismos servicios. También reconoció que todo esfuerzo merece la pena para recuperar la socialización en los mayores siempre con todas las medidas sanitarias que marquen las autoridades.
Para comenzar el curso como se merece, desde el Área de Bienestar Social se ha organizado una actividad para celebrar el Día del Mayor que tiene lugar cada 1 de octubre. El Parque de Narváez acogerá de 10 a 12 horas una cita que arrancará con un desayuno saludable. A continuación se darán a conocer las actividades de este nuevo curso con la idea de que los mayores vayan conociendo a sus monitores. Para finalizar se llevará a cabo un taller de animación con los lojeños Non Stop.
Tanto la edil como la coordinadora de Mayores, Vanessa García, informaron de esta actividad que esperan sea todo un éxito de participación. Se destacó que los desayunos serán en porciones individuales y que los bailes se harán con distanciamiento. En caso de lluvia adelantaron que la actividad se desplazará al Pabellón Alfeia. No avanzaron que obsequio se llevarán los mayores pero aseguraron que como en años pasados no se irán sin una sorpresa.
Pedro Sillero, presidente del Centro de San Francisco, se mostró muy emocionado de volver a ver abierto el centro y entiende que ahora gracias a que todos están vacunados se puede recuperar la vida sin bajar la guardia. Sillero aseguró que cada día le preguntan los mayores sobre el centro ya que entiende que al no tener actividades no tienen nada que hacer. “Del sillón al sofá nada más le damos vuelta a la cabeza y queremos pasarlo lo mejor posible mientras que podamos”, aseguró el representante del Centro de Envejecimiento Activo de San Francisco.
El alcalde de Loja, Joaquín Camacho, reseñó que el gesto de volver a abrir las puertas de los centros de envejecimiento activo no era algo menor sino todo un deseo esperado durante mucho tiempo. Para el regidor era fundamental recuperar las actividades de mayores toda vez que en el municipio vuelven las alternativas culturales, deportivas y para jóvenes. Camacho afirmó que desde el primer momento el objetivo era mantener la salud de los mayores pero que si las condiciones sanitarias lo permiten ahora hay que recuperar todo el potencial que existía antes de marzo de 2020.
