Quedan pocos días para que de nuevo escuchemos esa cantilena que tanto nos llena de ilusión por un momento. El tintineo de las bolas al girar en dos bombos dorados, uno muy pequeño, el de los deseados premios, y otro gigante, el de nuestros números. Es uno de los momentos más esperados de la Navidad, y este año volverá, como casi todo, marcado por la pandemia.
El próximo martes será 22 de diciembre y como reza el anuncio, nuestros sueños jugarán a la lotería con el reconocido ‘Gordo de Navidad’. Con motivo de ello, y para testar el ambiente de cara a esta esperada cita, nos hemos acercado a la administración más veterana del municipio, la número 1 ubicada en la Plaza de la Constitución, en pleno centro histórico de la ciudad. Allí nos recibe Celina Escobar, gerente de la misma, acompañada de una de sus trabajadoras, Carmen Moreno.
Celina lleva en la sangre la lotería. Su madre le dejó el testigo hace tres años. Quien no ha hablado de ilusión en los boletos con Mari Pepa Burgos, una mujer que consiguió aupar a los mejores puestos de ventas de la provincia la administración lojeña tras recoger el testigo familiar que arranca en los primeros años del pasado siglo. Ahora es su hija la que busca superar los éxitos de su madre. Cabe recordar que fue en el año 2012 cuando la administración lojeña repartió parte del quinto premio de la lotería nacional.
Al margen de la siempre esperanza en que el décimo más deseado este en nuestro bolsillo, este año la pandemia marca también este sorteo. El reparto de décimos siempre ha sido espectacular ya que peñas, hermandades, cofradías, asociaciones, partidos políticos, etc, juegan sus números y reparten gran cantidad de boletos. Escobar reconoce que este año esa demanda está siendo mucho menor, a lo que une la ausencia de turistas y la poca venta en la hostelería.
A falta de datos de última hora, siempre la jornada anterior se producen la mayoría de las devoluciones, estima que las ventas caerán mucho más allá del 30%. Para subsanar esto afirman que han puesto en marcha una página web para que se puedan hacer pedidos de desde fuera del municipio. También agradecen que muchos clientes se hayan mantenido fieles a la administración.
Pero la pandemia no puede con la esperanza de ver la administración llena de periodistas y agraciados en la mañana del 22 de diciembre. Es por ello que en la administración admiten no faltan las botellas de champán preparadas. Los días antes del sorteo siempre sueñan con ese momento. El ver los preparativos de los bombos permite comenzar a divagar con ser quienes repartan una lluvia de millones en el municipio.
En cuanto a preferencias de número sorprenden afirmando que la terminación en 20 es una de las más demandadas. “A pesar del año que llevamos es el número que más piden”, comenta Carmen Moreno quien también reconoce que el cinco sigue estando de moda. Otro número que se repite en las peticiones es el 13. Como número que reparten con más cariño está el código postal de Loja, el 18.300. También afirman que para animar a la venta hacen promociones como el sorteo de una subscripción anual a la Lotería Nacional.
Siempre hay quien busca un número o fecha determinada, para ello afirman que cuentan con una máquina que puede pedirlo o al menos buscar donde puede estar. También destacan que llevan a cabo intercambios con otras administraciones. Hay clientes que cada año buscan el mismo número por lo que se intenta satisfacer las demandas de cada uno de ellos.
A pesar de todos los deseos de que ‘El Gordo’ caiga en Loja, se tiene claro que la principal petición de este año es tener salud. También se pide algo de suerte para ayudar a muchas familias que en estos momentos viven momentos económicos de dificultad. Ante todo un deseo de esperanza en que la pandemia pase pronto de largo y se vuelva a recuperar la ilusión de nuestro día a día.
