Hoy día, cumplir 50 años de vida en común es motivo de celebración. Por esta circunstancia y, por tercer año consecutivo, el área de Bienestar Social del Ayuntamiento de Loja convirtió el salón de Plenos en un improvisado escenario de ceremonias nupciales para conmemorar las bodas de oro de 19 parejas lojeñas que se casaron en el año 1969 y cuyo importante paso les unió para toda la vida.
El aniversario se desarrolló en un ambiente festivo, rodeado de familiares y amigos, donde no faltó el amor raudales, gestos de complicidad, palabras emotivas, acompañado de una decoración especial para tan simbólico día. Fue Vanessa García, coordinadora de mayores, la primera en presentar a los protagonistas de la jornada, a los que dijo que “cincuenta años de casado no deben ser fáciles, lo que demuestra que es posible disfrutar de una hermosa vida en pareja, llena de recuerdos, alegrías y logros, por lo que representáis un ejemplo a seguir”.
Cincuenta años juntos, dan para muchas historias, como las de Dolores y José Espejo, cuyo amor nació entre primos y ha perdurado en el tiempo, gracias a “saber convivir y quererse mucho”, tras un enlace que celebraron en el mes de septiembre. O la pareja compuesta por Rosa Rosúa y Vicente Lobato que, por un día, no coincidió el festejo con el día de su boda, un 18 de mayo.
Entre los cerca de 20 homenajeados se encontraban también: María del Carmen Cuesta y Andrés Ortiz, Carmen González y Enrique Martín, María del Carmen Maldonado y Joaquín Yepes, Encarnación Pérez y Gerardo Camacho, Emilia Sevilla y José Valverde, Ana Ruiz y José Rodríguez, Carmen Montoro y Felipe Martín, María Teresa Piqueras y José Cruz, Consuelo Alba y José García, Emilia Morales y Rafael Campaña, Fermina Beltrán y Manuel Serrano, María Jiménez Aguilera y Juan Vivas, Rosa Delgado y Rafael Gutiérrez, Dolores Serrano y Bernardo Gámiz, Carmen Pelayo y Antonio Moreno, Concepción García y Luis Hinojosa y Francisca Delgado e Isidoro Aguilera.
Las primeras palabras de felicitación se las trasladó la concejala Matilde Ortiz, quien destacó “sus cincuenta años de amor, entendimiento, tolerancia, respeto mutuo y reconocimiento con la que habéis formado una familia con mucho esfuerzo y dedicación”. Sobre el acontecimiento que les organizó el Consistorio, la responsable del área manifestó que “queríamos recompensaros por vuestro compromiso social con el municipio, con este pequeño acto para que podáis tener el reconocimiento que os merecéis, así como disfrutar de un día en familia y tener un recuerdo para toda la vida”.
A continuación, un vídeo recogió los momentos más significativos de estas parejas, sobre todo, el día de su boda, lo que hizo brotar alguna que otra lágrima entre los presentes. Tras este momento cargado de emotividad, el alcalde de Loja, Joaquín Camacho, manifestó sobre la cinta que refleja “esa historia que hay detrás de cada uno, desde que os casasteis hasta hoy, cincuenta años de vida juntos, y lo que ha pasado está aquí presente con la familia que habéis formado con vuestros hijos y nietos”.
Comentó a los homenajeados que “hay momentos de gran felicidad y de adversidades que se superan con lo que vemos, unos novios ilusionados por celebrar en una ceremonia sencilla su bodas de oro y con las ganas de seguir adelante con un proyecto unidos por el amor”. Seguidamente, las autoridades presentes procedieron a la entrega de detalles personalizados a cada pareja, confeccionados por los usuarios del Centro Ocupacional.
Como en toda boda se precia, las parejas a las que el Consistorio lojeño les rindió homenaje disfrutaron de una cena homenaje en el patio central del Palacio de Narváez que estuvo amenizado con música de su época, una gran tarta nupcial y el brindis que finalizó con el baile y el aclamado: ¡Viva los novios!
