La asociación lojeña “AVE sí, pero no así”, acompañada por decenas de vecinos, se concentró ayer ante los restos de la estación vieja de Loja para condenar el derribo del edificio. El colectivo vecinal rechaza “toda la responsabilidad sobre este hecho y sobre otros que están sucediendo o puedan suceder en las obras del AVE a su paso por Loja, por el trazado antiguo”, indica en un comunicado leído durante esta concentración.
El colectivo dice estar de acuerdo con el alcalde “en que prevalezca la verdad”, para lo que pide que el Ayuntamiento les facilite el nombre de las personas a las que se les encargó el análisis del proyecto, además del seguimiento y la vigilancia de la correcta ejecución de las obras, el informe emitido por estas personas y las denuncias que haya efectuado el Consistorio y los documentos escritos respeto a cualquier indecencia o acuerdo sobre esta obra.
Una vez que se revise esta información, afirma ‘AVE sí, pero no así’, “podremos interpretar si el trabajo hecho por el alcalde es correcto y comprobaremos la verdad o falsedad de sus afirmaciones”.
El presidente de este colectivo, Gonzalo Vázquez, recoge el guante lanzado por el alcalde, respecto a la unidad que dice que se ha de tener en este momento, y afirma que la asociación acudirá a la manifestación de este viernes. Sin embargo, se refirió directamente a Joaquín Camacho, quien estaba presente en la concentración junto al resto de concejales del equipo de gobierno municipal, para recalcarle que esa unidad está “en el acuerdo firmado por unanimidad en febrero de 2013 por partidos políticos y asociaciones, en el que se pedía a Fomento que licitara la Variante de Loja por el sur y la nueva estación”.
